![La inteligencia artificial ya circula por las vías públicas de Madrid](https://s2.ppllstatics.com/rc/www/multimedia/2023/12/13/inteligencia-artificial-carretera-RgLY72ZdhEVM6vzUZ45c8YO-1200x840@abc.jpg)
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Canal Motor
Miércoles, 13 de diciembre 2023
El control del estado de las carreteras ya no necesita del ojo humano. Unos dispositivos diseñados por la empresa ASIMOB permiten detectar cualquier cambio o deterioro en las señales de tráfico, en las marcas viales de la calzada, el asfalto o en zonas de obras con una precisión mayor y a un coste mucho más reducido. Es lo que se ha dado en llamar el «inspector autónomo de carreteras» y ya lo utilizan instituciones como el Ayuntamiento de Madrid, la Diputación Foral de Gipuzkoa o la Junta de Extremadura, según recoge la DGT.
En detalle, este sistema permite monitorizar las señales de tráfico, las marcas viales (líneas, símbolos y letras), las barreras de protección y el pavimento. Y, además, todo se realiza con visión artificial a través de unos sensores que van a bordo de vehículos que detectan las anomalías de las vías. «Cualquier vehículo al que le dotemos de dos dispositivos se puede convertir en un inspector de la carretera. Esos dispositivos recogen la imagen y los datos con los sensores y luego esos datos son procesados y analizados», asegura Ibon Arechalde, CEO y cofundador de ASIMOB.
Así, la tecnología desarrollada por ASIMOB permite detectar irregularidades de la vía pública que escapan al ojo humano; y esto, en cualquier tipo de vía y carreteras, incluidas autopistas y convencionales. En la actualidad, sus servicios cubren el inventario automático de señales, la monitorización de las señales permanentes y de las temporales que se instalan en zonas de obras, la detección de incidencias en el firme y en las marcas viales, el impacto de los resaltes, el inventario y la detección de defectos en las barreras de protección. Además, también es posible registrar la presencia de agua, hielo, viento, niebla y nieve en la vía pública.
Pero, ¿qué diferencia existe con los inspectores 'manuales'? «La vista y la memoria son las herramientas principales de los inspectores tradicionales. Sacan fotos de los elementos que hay que reparar y están expuestos a situaciones de peligro solo por estar en la calzada. Con nuestro sistema, el vehículo circula a una velocidad normal y detecta y registra todas las evidencias de defectos en la vía pública. Y los dispositivos y las cámaras se colocan en vehículos que circulan frecuentemente por la zona con el fin de que el sistema sea también más sostenible. Además, se consigue una mayor transparencia con el gestor de la infraestructura porque hay constancia de todos los cambios que se producen en la carretera», puntualiza Arechalde.
«Nuestra tecnología se puede aplicar a cualquier país, porque es un sistema que sólo requiere instalar unos sencillos dispositivos para que funcione. Países Bajos es muy dado a probar toda la tecnología del sector y enseguida contactaron con nosotros. En Canadá y Brasil, trabajamos con empresas privadas y concesionarias de autopistas que buscan eficiencia en los procesos de inspección. También trabajamos con la Junta de Extremadura, el Ayuntamiento de Madrid, la Diputación de Vizcaya, la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Cunit (Tarragona), donde hicimos nuestra primera prueba en un entorno urbano», añade el CEO y cofundador de ASIMOB, orgulloso de que el sistema está siendo muy bien acogido. «El feedback es perfecto porque quien nos contrata una vez, repite, porque valora el impacto que tiene en la seguridad vial», añade.
Asimismo, los responsables de esta empresa tecnológica tienen claro que cada vía pública, según sus características, requiere un baremo de calidad y actuaciones diferentes. «En una autopista o una concesionaria, hay que arreglar los baches o las señales en un plazo muy corto. Cuanta más velocidad permita una vía, el criterio de calidad es más exigente. Además, este sistema permite responder con mayor inmediatez a cualquier problema del entorno urbano y no es necesario que un vecino se queje para detectar que algo no va bien. Otra cosa importante es que, con la analítica de datos, se puede saber, por ejemplo, por qué unas zonas del pavimento se deterioran más que otras y cuál es el mejor tipo de pintura para las marcas viales», concluye.
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