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Canal Motor
Lunes, 6 de mayo 2024, 12:00
Lo más novedoso en cuestión de cinemómetros, y que ya se pueden ver desde hace unas semanas en nuestras carreteras -son muchos los conductores que todavía desconocen su ubicación y funcionamiento-, son los radares de STOP y de línea continua. En realidad, este último son cámaras que vigilan a los vehículos en vías de aceleración que van a incorporarse a una vía principal. En caso de que las cámaras detecten que no se respeta la línea continua, sancionarán al infractor con una multa económica de 200 euros, pero, en este caso, sin retirada de puntos.
También están los denominados semáforos foto-rojo. Y es que este tipo de radar no tiene en cuenta la velocidad del vehículo, sino que está en funcionamiento para que se respeten los semáforos en rojo, de ahí su nombre. Se trata de una cámara que comprueba qué vehículos siguen circulando cuando se encuentran esta señal de tráfico. Saltarse un semáforo en rojo conlleva 200 euros de multa y la pérdida de 4 puntos del carné de conducir.
Sin olvidarnos de algo muy instaurado en las normas de tráfico y en carreteras, el uso del cinturón de seguridad y de los Sistemas de Retención Infantil. Y es que no usarlo es una infracción grave penalizada con 200 euros de multa y con la pérdida de 3 puntos en el carné si eres el conductor.
Por todo esto, la Dirección General de Tráfico ha instalado en diversos puntos de España una serie de cámaras de visión artificial para la detección automatizada de vehículos cuyos ocupantes no utilizan el cinturón de seguridad, como aquellos que no respetan los semáforos en rojo, la línea continua o la señal de STOP. AEA (Automovilistas Europeos Asociados) ha desgranado su ubicación.
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