Volkswagen urge a Sánchez a corregir el «disparate» de subir el impuesto de matriculación

«Somos el único país que no lo ha hecho y las consecuencias están ahí, con una caída del 51% en matriculaciones, cuando Francia ha caído un 5% e Italia un 15%. La relación causa-efecto es obvia», ha asegurado Pérez Botello en un encuentro con periodistas. «Eso se ha traducido en una pérdida de recaudación fiscal de más de 150 millones de euros. No sé si el Gobierno se puede permitir dejar de ingresar 150 millones de euros por una cuestión meramente ideológica. Estamos a tiempo de rectificar. Ojalá el presidente del Gobierno corrija esta situación y presente un decreto para corregirlo. Sabemos que cuenta con la inmensa mayoría del parlamento a favor», ha detallado.

A este respecto, ha asegurado que «ahora mismo tenemos una hemorragia. Y cuando tienes una hemorragia lo primero que hay que hacer es taponar. No es toda la solución, pero como poco (la subida de la matriculación) está suponiendo un 15% de caída en ventas. Y eso es mucho. Hay que cortarlo de manera radical. Y en paralelo trabajar en la reforma de la fiscalidad».

«El automóvil es el único gran sector industrial que le queda a España. Las palabras (del Gobierno) son muy buenas y la interlocución es muy buena pero los actos hacen que parezca no amigable», ha explicado Botello. «Nosotros vendemos España a nuestras centrales, defendemos las inversiones y peleamos como leones, pero hay determinadas decisiones que nos lo ponen muy difícil», insistió.

La compañía, que comercializa en España las marcas Volkswagen, Skoda, Audi y Volkswagen Vehículos Comerciales, incrementó un 150% la venta de vehículos eléctricos y alcanzó el 16% de cuota de mercado. Para este año, espera reforzar esta posición, al totalizar en su gama 16 vehículos eléctricos y 22 híbridos enchufables o PHEV que, espera, supondrán más del 10% de sus ventas.

En el mercado de turismos, el grupo vendió 127.000 automóviles, y ganó un punto porcentual de cuota de mercado. La marca Volkswagen se situó como líder en venta de vehículos eléctricos a particulares y subió un puesto en el ranking de ventas, hasta la segunda posición, después de Seat; mientras que la enseña premium Audi mejoró un 4,4% su cuota de mercado, con 38.000 ventas. Mientras, la checa Skoda alcanzó una penetración del 2,66%, hasta 22.600 matriculaciones, y espera alcanzar este año un 3% de cuota de mercado; y Vehículos Comerciales alcanzó el 8% de cuota, con 12.500 entregas.

Pese a la pandemia, la rentabilidad de la red comercial de Volkswagen Group España Distribución alcanzó el 1,5%, muy por encima de la media del sector, que ronda el 1%. «Este resultado era impensable en mayo, tras dos meses de cierre. Estoy especialmente satisfecho del esfuerzo de nuestros socios», aseguró Botello, que destacó el gran reto que para el sector supusieron los dos meses de parón total, «con ingresos cero y costes fijos muy elevados».

Preguntado por este periódico sobre la posible producción de un eléctrico pequeño en las plantas del grupo en Pamplona o Martorell (Seat), ha afirmado que «son decisiones que están en la cocina, y que por ahora muy pocos conocen». Sobre la instalación navarra ha asegurado que «es de las mejores que tenemos» en el grupo a nivel mundial. «Este año está muy cerca del 100% de capacidad».

El directivo ha urgido al Ejecutivo a impulsar la red de recarga de vehículos eléctricos, desarrollando la declaración de los puntos de carga de alta potencia como de utilidad pública. También ha insistido en la necesidad de abordar en la reforma de la fiscalidad del sector, por la vía que la asociación Anfac propuso el pasado marzo y que, según Botello, tuvo por parte del Gobierno «un feedback muy positivo». «Pero después las cosas no traccionan», explicó Botello, que culpó de ello al hecho de que en el Gobierno «hay dos puntos de vista». «Es un tema básicamente de Transición (Ecológica)», apuntó.

«Nosotros propusimos la creación de un nuevo impuesto que se pagaría anualmente indexado a las emisiones de cada vehículo. No supondría una cantidad anual muy grande, pero al aplicarse sobre casi treinta millones de vehículos su efecto recaudatorio sería muy grande. Y a cambio eliminar el impuesto de matriculación, que solo tienen tres países. También establecer un IVA cero para los eléctricos y un IVA reducido para los enchufables», desgranó. «Provocaría muchas bajas de coches viejos -en Madrid el 80% de las emisiones lo generan los coches de mas de 15 años, solamente cambiando los coches viejos por nuevos diésel las emisiones bajarían mas de un 50%, recordó, citando un estudio- y al mismo tiempo aumentaría la recaudación».