El paso de los Reyes Magos por algunas localidades de la provincia de León podría haber dejado además de oro, incienso y mirra; una multa administrativa. La Junta de Castilla y León ha abierto expediente sancionador a León, San Andrés, Villaquilambre y Sariegos, según han confirmado fuentes de la administración autonómica.
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Y es que la Junta culmina así lo que ya avisó en su día: que estas celebraciones podrían acarrear sanciones si incumplían con la normativa que establece el Bocyl del 24 de julio. Advertencias que llegaron por parte tanto del presidente Mañueco como del vicepresidente Francisco Igea, que alertaban de su «prohibición» al poner en riesgo «la salud de las personas».
Un 'regalo' que supone escarmientos económicos de entre 100 y 600.000 euros, en función del número de personas, de 15 a más de 150, a las que se podría haber puesto en riesgo durante el acto que es susceptible de considerarse peligroso para la salud, en este caso, las cabalgatas de Reyes.
Muy grave: de 60.001 a 600.000 euros aquellas que puedieran ocasionar «un riesgo o daño muy grave para la salud de la población, entendiendo por tal los incumplimientos que supongan un riesgo de contagio a 150 personas o más».
Grave: de 3.001 a 60.000 euros por riesgo de «producir un riesgo o daño grave para la salud de la población, entendiendo por tal los incumplimientos que supongan un riesgo de contagio a más de 15 personas y menos de 150 personas».
Leves: de 100 a 3.000 euros por «producir un riesgo o daño leve para la salud de la población, entendiendo por tal los incumplimientos que supongan un riesgo de contagio a 15 personas o menos«.
Los matices para la resolución definitiva de este expediente sancionador, que puede ser recurrida por los ayuntamientos en un plazo de 6 meses, recaen sobre todo en el carácter estático o no de estas comitivas o cabalgatas.
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Las alternativas a las tradicionales cabalgatas que se vieron por todo León fueron diversas. Desde coches tradicionales, a todoterrenos descapotables que no avisaban de su recorrido con los majestades de Oriente a bordo para evitar aglomeraciones y que por tanto «no supuso peligro para los ciudadanos», como ha apuntado el alcalde de León José Antonio Díez, uno de los ayuntamientos a los que les ha llegado la notificación por incumplir la normativa.
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