Valdefresno: el legado de las tierras de Sobarriba
La comarca leonesa ha mantenido costumbres, tradiciones y una fuerte cultura religiosa que con el paso de los años se ha materializado en parte de la herencia histórica del territorio
Su proximidad con la capital, León, ha influido notablemente en el desarrollo histórico de la comarca de la Sobarriba que actualmente integran los municipios de Valdefresno, Villaturiel y parte del municipio de Vegas del Condado. Situado en el alfoz de la capital, el municipio de Valdefresno cuenta a su vez con otros veinte núcleos.
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Coincidiendo con la llegada del pueblo visigodo a la Península en el V, la zona de la Sobarriba estaba poblada por pequeños y escasos núcleos rurales indígenas, que pocas condiciones favorables ofrecieron tanto a los visigodos como anteriormente a romanos y celtas, con la excepción de los situados en las vegas y las márgenes de los ríos. En estas zonas poseían cierta riqueza agrícola y buena situación estratégica como lugares de observación y paso de norte a sur y viceversa. Después, durante el periodo que comprenden los siglos VI y IX se produjo un notable descenso de la población, debido previsiblemente a enfermedades, epidemias y malas condiciones climáticas.

Fueron los reyes astur-leoneses quienes iniciaron un proceso de repoblación atrayendo a vecinos del Norte. Y es a partir del siglo VII cuando comienzan a aparecer documentos acreditativos de la existencia de poblaciones y asentimientos en esta comarca en referencia a este proceso de repoblación. La Sobarriba toma importancia a raíz de la constitución de León como ciudad, es decir a partir de fundar los reyes Leoneses su capitalidad en el siglo X. Un punto de inflexión que supuso el florecimiento de los pueblos cercanos a la capital. Una situación que hoy en día intentan mantener haciendo frente a la despoblación generalizada del medio rural en todo el territorio.
La influencia de la religión cristiana ha quedado patente no solo por las numerosas iglesias de los pueblos de la comarca sino también por el paso del Camino de Santiago. Un tramo recuperado recientemente a la altura de Valdelafuente, por la parte norte y proveniente de Arcahueja.
Fechas clave
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Primeros escritos: No es hasta el siglo VII cuando comienzan a aparecer documentos que acreditan la existencia de poblaciones y asentamientos en la zona de la comarca de Sobarriba.
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Repoblación leonesa: Entre los siglos VI y IX se produjo un importante descenso de la población en la zona hasta que los rees astur-leoneses iniciaron un periodo de repoblación que atrajo habitantes de la zona Norte.
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Capitalidad de León: El traslado del rey García I (910-914) de la Corte a León que se convertiría en la capital del reino hata 1230 supuso un punto de inflexión para el desarrollo de los núcleos en el alfoz, entre ellos el de Valdefresno.
En este punto se encuentra el transitado Camino de Santigao que desde el siglo XIII, con la oficialización de la Ruta Calixtina o Camino Francés se dirigen a Santiago. Pero sin duda, quien tuvo un peso especial en la vida de los ciudadanos de la comarca fue la Virgen del Camino, protagonista de la tradicional romería que se remonta al siglo XII.
Una fiesta que en la que hoy en día participan los vecinos de las veinte localidades que integran el municipio, Arcahueja, Carbajosa, Corbillos de la Sobarriba, Golpejar de la Sobarriba, Navafría, Paradilla de la Sobarriba, Sanfelismo, Santa Olaja de Porma, Santibáñez de Porma, Santovenia del Monte, Solanilla, Tendal, Valdefresno, Valdelafuente, Villacete, Villacil, Villafeliz de la Sobarriba, Villalboñe, Villaseca de la Sobarriba, y Villavente, cada una de estas localidades procesionan con los patronos y los pendones de cada lugar.
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