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La tensión en el Partido Socialista de León empieza a ser insostenible y ya ha traspasado la barrera de las declaraciones a los hechos.
Así lo han denunciado ante la ejecutiva federal del Partido Socialista desde el equipo de Javier Alfonso Cendón, informa Leonoticias.
Durante el proceso de recogida de avales, según señalan a la dirección socialista, el militante Miguel Ángel Rey -de la agrupación de Bembibre-, «apoderado de Diego Moreno», según explican fuentes del partido, ha protagonizado un episodio «intolerable e incompatible» con los principios del PSOE.
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Tildando su actitud de «agresiva e intimidatoria», se dirigía a Javier Alfonso Cendón, secretario general del PSOE de León, con insultos como «gilipollas», además de encararse de «manera amenazante», lo que obligó a intervenir a la treintena de compañeros que fueron testigos de estos hechos.
Una vez apartado, según recoge la denuncia, «ha continuado con su actitud violenta» y se ha dirigido a Gerardo Álvarez Courel, presidente de la Diputación de León, llamándole «traidor y chaquetero».
Considerando que este tipo de conductas «atenta gravemente» contra los valores de respeto, convivencia y democracia y que generan «un clima de hostilidad inaceptable» han apelado al artículo 8 del Estatuto del PSOE y tipificado como «faltas muy graves» las conductas que atenten contra la integridad y el respeto entre militantes.
La denuncia solicita a Ferraz la apertura de expediente disciplinario y su expulsión del partido, ante lo que se ha procedido a un suspensión de militancia y apertura del expediente correspondiente hasta estudiar los hechos.
El candidato a la secretaría general del PSOE de León, Diego Moreno, ha explicado cómo vivió este tenso episodio en la sede socialista. «Escuché voces en el pasillo de la sede y mi reacción fue separar a las dos personas. Vi a dos compañeros gritando y mandamos a cada uno a un rincón».
La lista alternativa a Javier Alfonso Cendón ha condenado este tipo de actitudes y deseando que no ocurrieran. Además, ha recordado que en su candidatura solo «soy responsable» de los compañeros David Corral y Andrea Fernández, por lo que ve en esta acción una maniobra en su contra. «Parece que hay una campaña de desprestigio hacia mi persona».
Moreno recuerda que no puede ser responsable de actitudes de 3.000 militantes y que se presenta a unas primarias donde «intento proponer mi proyecto, pero hay mucho ruido y una candidatura dispuesta a embarrar más que a presentar», por lo que rechaza un ambiente que «pasa todos los límites».
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