El marino que llega a buen puerto en la política

En mitad del Mediterráneo, en un barco mercante, Omar Rodríguez recibió la noticia. Desde el PSOE le informaban de que había sido reeligido como alcalde de Maraña. Más de dos meses después de aquel día, tomará posesión del cargo.

Esta es la historia de este joven leonés de 35 años que afronta su segundo mandato en el Ayuntamiento de Maraña. Es de la montaña, de la capital del Macizo del Mampodre, y alcalde de un municipio de 100 habitantes, pero al que siempre le gustó el mar y los barcos.

Y es que desde lo alto de las montañas leonesas, en los días despejados, se avista el agua salada en la que ahora pasa horas, días y más de cinco meses cada año, como confiesa a leonoticias. Llegó casi de casualidad a esta profesión, aunque ama el mar.

«Cuando terminé la selectividad, no tenía muy claro qué estudiar. Sabía que quería hacer una ingenieria y me decidí por Ingeniería Marina», explica Omar Rodríguez, que se mudó a Gijón para completar su formación.

Ahora, con más de cuatro años de experiencia en los mares, lleva prácticamente este mismo tiempo compaginando la vida en el mar con el gobierno de su municipio. Porque no es un alcalde novel, es un regidor que ha sido reelegido, lo que habla de su buena labor al frente del Ayuntamiento de Maraña pese a su profesión, que le impide estar todo el año en su localidad natal.

«Siempre quise hacer algo para mejorar mi pueblo y vi que esta era la mejor opción para hacerlo», explica Omar Rodríguez, que gestiona el municipio a bordo de los barcos en los que trabaja, en sus distintas expediciones, gracias a la informática y la conectividad desde cualquier punto del planeta gracias a internet. «Hoy en día, es todo más sencillo».

Ha visitado 35 países de todo el mundo y todos los continentes salvo la Antártida. Le han sorprendido especialmente los países de Asia, «son los más diferentes a Europa» y espera seguir navegando, conociendo países y sumando experiencias.

Esta pecualiar profesión para un marañés le ha impedido hacer campaña electoral, ya que estaba en una expedición en el Mediterráneo. En vez de organizar mítines y actos de campaña, Omar Rodríguez, oficial de máquinas, se encargaba de que los grandes motores y turbinas del barco con el que surcaba el Mediterráneo estuvieran en plenas condiciones.

«Enhorabuena. Hemos logrado cuatro de los cinco concejales. Serás de nuevo alcalde de Maraña». Con este mensaje que recibió en alta mar, conoció que volvería a seguir trabajando para sus vecinos a miles de kilómetros de distancia y este sábado tomará posesión del cargo, siendo el alcalde que más se ha hecho esperar para su investidura. Pero, como en el mar, lo importante es llegar a buen puerto.

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