Caos en la estación de León: «Han empezado los juegos del hambre»

La estación de trenes de León ha vivido escenas de «ansiedad» por la desinformación que ha mantenido a decenas de personas al sol y a la espera de un solución que no llegaba.

Tras partir con 14 minutos de retraso desde Madrid, el convoy que debía llegar antes de las 9:30 horas a la estación leonesa se detenía para «resetear», tal y como se trasladaba a los pasajeros que iban a bordo, según ha informado Leonoticias.

La parada iba a ser por 10 minutos, pero nada de eso. «La gente empezaba a tener ansiedad, iban con bebés y no informaban de nada. Encima se apagó el aire acondicionado», explicaba uno de los usuarios cuyo viaje se veía interrumpido esta mañana.

El tren que debía continuar hacia Asturias no iba a llegar ni a la estación de León. La avería se producía «a unos diez minutos» de la capital leonesa. A las 10:55 horas, los pasajeros fueron apeados a las vías y cambiados de tren para seguir hacia la estación de León, con la esperanza de que el mismo continuara trayecto a Asturias, pero ese tren se quedaba en León.

La angustia fue a más y los pasajeros abandonaron el tren en León, provocando el caos absoluto en el vestíbulo de la estación que no tenía capacidad para alrededor de 400 personas -en total iban montadas cerca de 500, pero un centenar tenía como destino León-. Hubo gente que optó por esperar en la vía «al sol» porque no entraban.

Renfe ha ido recolocando, poco a poco, a los usuarios en cuatro trenes diferentes que llegaban a León, siendo los últimos realojados a las 12:30 horas. «Nos dijeron que a las 12:30 nos iban a recoger, pero ya son las 13:20 y nada».

Muchos de los usuarios habían conseguido un billete con una oferta entre Madrid y Gijón a 20 euros. Pero lo barato, les ha acabado saliendo caro. «Nos dijeron que había una avería en el pantógrafo y por eso se paró». Algunos tenían bodas en Asturias a las que no llegaban, otros acudían a congresos y no sabían a qué hora.

La policía ha tenido que acudir a la estación para controlar la situación. Todo el vestíbulo estaba ocupado por pasajeros que buscaban una solución para poder continuar su viaje tras cuatro horas de espera.

No fue hasta las 13:30 horas cuando llegó la solución definitiva. Parte de los pasajeros viajarían en tren, dando prioridad a personas mayores y familias con niños niños «por cuestión de espacio», mientras que el resto tendrían que emprender el camino a sus destinos por autobús.

La situación ha provocado retrasos en diferentes trenes de la línea Madrid-Gijón.

El caos continuó tras el anuncio de realojo en tren y autobuses. La gente intentaba pasar aunque no acudieran con niños y sin ser gente mayor. Cuatro policías nacionales, los revisores de Renfe y personal de seguridad privada trataban de poner orden en la situación.

En las taquillas se situaban las personas mayores y niños, mientras que en el otro lado del hall de la estación esperaban los pasajeros que saldrían en dos autobuses.

La solución y la vuelta a la normalidad no se produjo hasta pasadas las 14:00 horas.

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