Montserrat, Triana y Raquel Gago, culpables del asesinato de Isabel Carrasco

Exactamente cuando se cumplan las 72 horas de deliberación, el jurado popular del juicio por el crimen de Isabel Carrasco dará lectura del veredicto que determinará el futuro de Montserrat, la asesina confesa; su hija, Triana Martínez, y la agente de la Policía Local Raquel Gago.

«A las 17:15 horas del 12 de mayo del 2014 Montserrat González asestó por la espalda y sin que se pudiera defender tres tiros a Isabel Carrasco». Su respuesta permitirá proclamar la «culpabilidad o inculpabilidad» de Montserrat de un delito de asesinato y será la apertura del objeto del veredicto del juicio por el crimen de Isabel Carrasco.

De cerca una pregunta clave. «Montserrat había planeado el asesinato de Isabel Carrasco con su hija Triana y Raquel Gago», con la que se probará si el crimen de la dirigente política fue un plan urdido por las tres mujeres imputadas en este proceso judicial. Y así hasta un total de 84 de un cuestionario con el que se intentará demostrar la implicación y el grado de las tres mujeres.

Una deliberación que este sábado ya cumple su cuarta jornada. Siguiendo una rutina que se repite desde el pasado miércoles, los cinco hombres y cuatro mujeres que conforman el jurado popular se han trasladado a primera de este sábado del hotel a la Audiencia Provincial para continuar con la deliberación.

Hermetismo y expectación a partes iguales, dentro y fuera. A punto de cumplirse las primeras 72 horas, el jurado, que inició su deliberación minutos antes de las 13:00 horas de este miércoles, continúa intentado dar sentido a las piezas que conforman el puzle del crimen de Isabel Carrasco.

«Montserrat conocía que el arma utilizada para cometer el crimen tenía el número de serie borrado» o «Montserrat utilizó una parca, gorra, guantes y gafas de sol para evitar ser reconocida», son algunas de las preguntas que intentarán demostrar que el crimen estaba planeado meticulosamente, al detalle para intentar no ser descubierto, lo que probaría el agravante de disfraz y dejaría en entredicha el trastorno mental en el que se apoya su defensa.

Claves para el veredicto

«Montserrat hizo entrega del arma del crimen a Triana» o «Triana realizo o participó en prácticas de tiro», son preguntas claves para intentar demostrar o no si la joven estaba al tanto de los planes de su madre e incluso era partícipe de ellos, como así reiteran tanto el representante del Ministerio Fiscal como las tres acusaciones particulares.

Aunque si algo o más bien alguien está atascando la deliberación del jurado es la figura de la agente de la Policía Local. Preguntas como Raquel había quedado con Triana en esconder el arma del crimen, Raquel nunca vio el bolso con el arma hasta que bajo a su cochera a llevar a una bicicleta o Raquel se adelantó y entrego el arma sin estar involucrada en la investigación, son claves para arrojar determinar si la joven participó en los planes, fue cómplice con madre e hija, intentó encubrir el arma o simplemente fue un daño colateral del crimen.

Y así hasta un total de 84 preguntas que los nueve miembros del jurado deberán responder una a una con un favorables o desfavorable, motivándolas con las pruebas y testimonios aportados. El objetivo, declarar probados o no probados cuatro hechos justiciables: el delito de asesinato por la muerte con alevosía de Isabel Carrasco, el delito de atentado contra la autoridad, ya que la víctima ostentaba el cargo de presidenta de la Diputación de León, el delito de tenencia ilícita de armas de fuego, y, solo en el caso de Raquel, el delito de encubrimiento.