Ángel Villalba cree que se trata de una maniobra política

El Tribunal de Cuentas aprobó el 23 de julio un informe sobre lo ocurrido en Feve entre los años 2005 y 2012, sin atender las alegaciones formuladas por quien durante más tiempo presidió la entidad entonces, Ángel Villalba.

El Tribunal sostiene que llegaron fuera de plazo. El informe indica que Renfe y Adif tienen una querella contra Villalba, sin exponer que había sido archivada por la Audiencia Provincial mes y medio antes.

Disgustado con lo que el socialista estima «errores importantes, contradicciones significativas, ambigüedad en determinadas observaciones y omisiones no causales», acaba de remitir al órgano de fiscalización un escrito preparado por su abogado. En él sostiene que el informe divulgado por el Tribunal «aparece claramente posicionado a favor de las tesis mantenidas desde 2012 por el PP» y que se han visto «rechazadas de forma contundente en los tribunales ordinarios».

Sugiere que Villalba puede denunciar al Tribunal «por entender que pudiera actuar sin rigor (...) convirtiéndose en un instrumento político» del PP. En declaraciones a El Comercio, el expresidente confió en que el procedimiento por reintegro termine como la querella criminal: archivada.