El derrumbe del techo de una iglesia en México causa diez muertos y sesenta heridos

Las primeras investigaciones apuntan a que una falla en la estructura de la iglesia, de estilo industrial y levantada hace medio siglo, hizo que el techo colapsara y se viniera abajo. El derrumbe –grabado por una cámara de seguridad de la zona– fue tan repentino que no dio tiempo a que el templo fuera desalojado. Las autoridades temen por ello que numerosas personas sigan bajo los escombros y que la cifra de fallecidos –entre ellos habría, al menos, un bebé– sea aún mayor. De hecho, en las últimas horas se han visto obligadas a actualizar varias veces el balance a medida que avanzaban las complicadas labores de rescate.

«En estos momentos se están haciendo los trabajos necesarios para sacar a las personas que aún se encuentran debajo de los escombros. Agradecemos a todas las autoridades el apoyo que nos están dando», indicó el obispo de Tampico, José Armando Álvarez Cano. En la zona se ha desplegado personal del equipo de búsqueda y rescate urbano de la secretaría de Marina, varias unidades de la Guardia Nacional y la Estatal o efectivos de la Cruz Roja. También se han acercado profesionales sanitarios de manera voluntaria y vecinos de la parroquia derrumbada, que han llevado herramientas para ayudar en las tareas de desescombro e incluso agua para los rescatistas que tratan contrarreloj de encontrar vida bajo los pedazos amontonados del templo de Santa Cruz.

Américo Villarreal, gobernador del estado de Tamaulipas, en el noreste de México, mostró a través de las redes sociales su «solidaridad con todas las familias que han perdido a sus seres queridos y con la comunidad por este lamentable accidente». Todos los domingos, recordó, eran «especiales» por la cantidad de bautizos que acogía esta iglesia.

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