el norte
Martes, 14 de junio 2022, 13:38
Pablo Motos comenzaba el programa del pasado lunes, 13 de junio, diciendo: «Hoy vienen dos heroínas que han plantado cara a Putin», refiriéndose a la visita del grupo activista Pussy Riot. Masha Aliójina y Olga Borisova, dos de sus componentes, se sentaron frente al presentador para explicar que son un «movimiento de artistas y activistas contra la dictadura, homofobia, patriarcado, misoginia...».
Publicidad
Las artistas, que visitan España para recibir el premio Alan Turing LGTBIQ+ en Tenerife, donde actuarán el próximo 17 de junio, aseguraron que, mientras aquí les dan reconocimientos, en «Rusia si eres gay te pueden matar, es ilegal expresarte abiertamente como gay. Hay una ley de 'prohibición de la propaganda gay' y, aunque oficialmente no meten a la gente en la cárcel por ser gay, se buscan otras excusas».
Tras esas palabras, Motos sacó una bandera LGTB y preguntó qué le ocurriría a un presentador como él si la mostrara en prime time en la televisión rusa, una respuesta que ellas tuvieron clara: «Inmediatamente sería imputado, le enjuiciarían y le despedirían, sin duda».
Él quiso saber si le podría caer condena de cárcel: «Se buscarían otras excusas. Como en la región de Chechenia donde gobierna un dictador controlado por Putin y es una región donde si eres lesbiana o gay te matan. Hay un documental tremendo, Bienvenidos a Chechenia que recomiendo que veáis», señalan.
0,99€ primer mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.