Noche sexual y secreto bomba en 'La isla de las tentaciones 4'

La sexta gala de 'La isla de las tentaciones 4' hizo saltar por los aires a tres de las cinco parejas que entraron a vivir la experiencia. Nico y Gal·la tuvieron sexo con otras personas la misma noche, una situación muy parecida a lo que están viviendo Rosario y Álvaro. Por su parte, la relación entre Sandra y Darío ha saltado por los aires, al descubrirle a él el secreto que tenía guardado uno de los tentadores.

Las chicas vivieron una hoguera en la que Tania se vino abajo por no ver imágenes de Alejandro. Y ellos hicieron lo propio, con el arrepentimiento inesperado de Nico.

Pero, lo cierto es que la fiesta nocturna en casa de los chicos, calentó a Nico y fue el primero en irse a dormir con Miriam, con quien tuvo sexo, convirtiéndose en los primeros en estrenar la edición. Una situación que hizo sonar la alarma en casa de las chicas, donde Gal·la preguntaba a los chicos por los sentimientos de Miguel. Cuando ellos le dijeron que quería ir despacio con ella porque sentía que era algo más que una atracción, ella le invitó a su cama y también hicieron el amor, lo que provocó, de nuevo, que se encendiera la luz de la tentación en casa de su novio.

Pero aún habría más. Rosario se metía en la piscina con Simone, con quien tuvo un acercamiento pero al salir del agua ella se reafirmó en que no sentía lo mismo que por el canario. Por lo que pidió a Suso que durmiera con ella y se metieron en la cama. «No puedo estar a tu lado y no besarte», le decía el canario, de forma que fueron calentándose hasta que culminaron.

Tania, Zoe, Gal·la, Rosario y Sandra llegaron frente a Sandra Barneda para ver nuevas imágenes de sus novios. Rosario veía cómo Álvaro daba las gracias a Sabela por enseñarle a saber lo que quiere en su vida. Para, a continuación, verles intimando en la misma cama: «Me siento incómoda y duele porque sé que no es más que un calentón».

Por su parte, Zoe acató el castigo por infringir las normas: no ver imágenes de Josué hasta la hoguera final pero sí escucharlas. Por lo que le escuchó decir «mi relación me suda la polla, teníamos muchas broncas» y descubrió que su cita fue con Jennyfer. «Me da pena que por hacerse el machito me lo esté haciendo pasar tan mal que me esté planteando todo. Es un cobarde por no decirme a mí lo que siente».

La que se derrumbó fue Tania al escuchar que no había imágenes de Alejandro: «Sé que está mal, me duele muchísimo pero creo que le va a venir bien para que reflexione y llegue al punto de saber que no puede actuar de esa manera». La presentadora argumentó la decisión para que siguiera siendo libre sin «condicionarla». Algo que ella aceptó: «Voy a seguir con mi actitud con Stiven para que vea que aún así puedo seguir siendo leal. Echo de menos más de lo que imaginaba a Alejandro».

Sandra vio a Darío lamentando la dinámica de ambos al cortarse cuando sale de fiesta. «Comentarios innecesarios, como siempre», criticó ella que se mostró dolida, «no sé en qué fallo porque creo que no le he fallado en ningún momento».

Como broche final, Gal·la aseguró que nada podía «decepcionarle» tanto como la ausencia de Nico en la hoguera, pero no sabía lo que se avecinaba. Vio a su novio criticando sus relaciones sexuales, sentirse por encima de él, tratarlo como un tonto... ella se reafirmó al pensar en que es «muy influenciable». Al verle besándose y acostándose con la tentadora se quedó sin palabras: «Me da asco. Perderme va a ser lo peor que le pase en su vida. No lo reconozco. Estoy deseando que lo vea su familia. Se está creyendo que es alguien que no es».

De camino a la hoguera, Alejandro sufrió otro ataque al imaginarse lo peor y pidió bajarse del coche. Salió, cogió aire, y volvió más tranquilo.

Josué fue el primero en ver a Zoe, cada vez más cercana a Tania pero él no le dio importancia. Al contrario que Alejandro que se preocupó aún más, confesando que ya no le importaba tanto Stiven, porque creía que su novia podía tener algo con la de Josué.

El siguiente fue Nico que se sorprendió al ver a Gal·la besándose con Miguel. «Nos hemos cargado la puta relación. Si lo hemos hecho los dos es porque había de todo menos amor, cariño, pasión, deseo... éramos compañeros y ya está. Pero me duele un montón verlo. Después de dormir con Miriam, me lo pasé bien, pero me sentí raro por no ser ella». Y aún hubo más imágenes para él, en las que ella se acostaba con su tentador: «No me da igual, porque veo que el problema del sexo era por mí. Pero creo que no le gusta».

Turno de Álvaro que vio a Rosario acostarse con Suso, para más tarde confesar su atracción por Simone: «Me he dado cuenta de la persona que tenía al lado, tanto tiempo de mi vida. No existo para ella, pero yo sí la echo de menos».

Alejandro, por fin, vio las imágenes de Tania reflexionando sobre su relación. «La veo decepcionada conmigo y no sé por qué», lamentaba aturdido. Pero explotó cuando la vio jugando a pasar su lengua por el cuerpo del tentador: «Me quiero ir ya de aquí, no entiendo qué le está pasando a esta chavala. Me molesta todo porque no lo está haciendo bien». Y para acabar la escuchó leer la carta de Stiven: «La veo liberada como si yo fuera un peso. Me da pena».

Por último, le tocó el turno a Darío que descubrió el secreto de Sandra, sobre que le había sido infiel dos semanas antes del reality. Al escucharlo, todos se quedaron boquiabiertos y él no tuvo palabras.

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