Cómo convertirte en un 'influencer'

Egobloggers, fashionbloggers, gastrobloggers, beautybloggers, instagramers, youtubers y un sinfín de nombres anglosajones complicados de descifrar tejen el nuevo entramado de influencers, dejando de lado a actores, modelos y cantantes.

Si alguien domina ese territorio hostil es Cristina Blanco, experta en fabricar 'sueños' que se ha atrevido a plasmar sus vivencias y consejos en el libro 'Objetivo: Influencer' (Editorial Arcopress). ¿Quién no ha querido hincar el diente al popular sándwich Corty? Ella se encargaba de colocarlo con esmero para las fotografías promocionales ayudándose de docenas de palillos. Gracias a su extenso bagaje en el mundo de la publicidad y las relaciones públicas, en el que trabajó hasta que se pasó a las producciones de moda, conoce las necesidades de todas las partes.

Ella es una de las pocas agraciadas -aunque su modestia le impida meterse en ese listado- con un enganche especial con el público que ha sabido ganarse la confianza de las marcas con su blog, Guía de estilo. ¿Las cualidades necesarias para meterse en ese 'olimpo'? "Tienes que ser un buen relaciones públicas, transmitir positivismo, ser abierto y educado". En su caso, la sinceridad y la honestidad son una ventaja en un sector nuevo en el que muchas firmas están perdidas. "Si no vas a dar la talla de lo que la marca te pide, no lo hagas. Se tiene que entender bien el mensaje que se quiere transmitir", subraya Cristina, que insiste en que se está ofreciendo un servicio en un nuevo canal de comunicación, por lo que la relación "debe ser profesional".

¿Ejemplos a seguir? Sara escudero, del blog Collage Vintage, porque "tiene una fotografía impecable y transmite muy bien. No ha necesitado hacer un exceso de relaciones públicas para triunfar". A nivel internacional, Sincerely Jules. "Es muy fresca, tiene 'looks' muy ponibles, aunque sean de súper marcas. Además, tiene mucho 'lyfestyle' (estilo de vida) y cuida mucho la estética".