Maisie Williams, de Juego de Tronos, no aguanta las lágrimas al recordar su infancia
La actriz, que interpretó el papel de Arya Stark en la popular serie, recuerda esa etapa de su vida diciendo: «Era como estar en una secta»
el norte
Miércoles, 28 de septiembre 2022, 17:13
Maisie Williams se hizo popular gracias a su participación en la serie de HBO 'Juego de Tronos', donde interpretaba el papel de la joven Arya Stark. Ahora, 11 años después, la joven ha desvelado cómo fue su dura infancia en una entrevista en la que no pudo evitar romper a llorar.
El espacio radiofónico Diary of a CEO Podcast, conducido por Steven Barlett tuvo la fortuna de hacerle la entrevista a la actriz. Allí, Williams hizo un repaso a cómo era su vida antes de convertirse en una estrella mundial. «De pequeña, antes de cumplir 8 años, tenía una traumática relación con mi padre. No quiero entrar mucho ahí, porque afecta a mis hermanos y a mi familia entera», empezó explicando.
La actriz asegura que «eso consumió mucho de mi infancia»: «Desde que tengo memoria he tenido muchos problemas para dormir. Y creo que ni me daba cuenta de que muchas de las cosas traumáticas que pasaban estaban mal, pero sabía que si miraba a otros niños era como: '¿Por qué parece que no entienden el miedo, el dolor? ¿Cuándo me llegará a mí la alegría?», reflexionó.
Maisie Williams aseguró que sus padres se divorciaron y que su madre «escapó cuando tenía cuatro meses», aunque las cosas estaban ya mal desde mucho antes. Sin embargo, no fue hasta que tenía ocho años cuando se dio cuenta de que la situación con su padre era realmente grave. En aquel momento, una profesora se reunió con ella para preguntarle qué le estaba pasando.
«Y me decía cosas como '¿Tienes hambre? ¿Has desayunado?' Y yo: 'No'. Y ella: '¿Y por qué?'. Y yo decía: 'No tenemos nada para desayunar''. '¿Normalmente desayunas?», dijo, recreando la conversación. Según la intérprete, la mujer «estaba haciendo las preguntas correctas». En ese instante, Williams rompió a llorar, desbordada por la emoción, por lo que el presentador se vio obligado a levantarse para darle un abrazo.
A raíz de eso, su madre fue a buscarla y fue la primera vez en la que «las puertas estaban abiertas» para «poner sobre la mesa» todo lo malo que le estaba pasando: «Fue muy duro, porque yo aún quería luchar y decir: '¡No, estas cosas no son malas, estás intentando alejarme de mi padre y eso está mal!', porque estaba adoctrinada», confesó. «Creo que por eso me obsesionan tanto las sectas, porque es como ¡lo entiendo, yo estaba en una secta infantil!», comparó.
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.