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El Norte
Jueves, 26 de diciembre 2024, 18:50
Una de las anécdotas más chocantes surgidas del sorteo de la Lotería de Navidad 2024 es la que hace referencia a como una de las niñas del colegio de San Ildefonso participantes en la jornada que cantó por error un segundo Gordo. El hecho dio pie a una polémica por la que tuvo que salir al paso la propia organización de la Loterías y Apuestas del Estado a explicar lo sucedido y zanjar toda suspicacia, según recoge el portal Vertele.
No obstante, la joven estudiante se ha visto igualmente señalada por el fallo a través de redes sociales, después de que explicara que, aunque leyó bien la bola (que indicaba un premio de 1.000 euros), «me han dicho que diga cuatro millones». Según explicaban desde la organización a Europa Press, la pequeña que cantaba los premios se puso «nerviosa» y en lugar de mirar la bola, en la que ponía 1.000 euros, ha cantado «lo que ha estado ensayando estos días». En todo caso, una duda que ha surgido es si la niña llegó a equivocarse a propósito, tratando de seguir algún juego viral.
Sea por el motivo que fuera, desde el domingo no han faltado mensajes en tono discriminatorio contra la muchacha, que su madre quiere cortar de raíz, a través de TardeAR. No lo hacía directamente, puesto que vive fuera de España, sino a través del redactor Fran Almansa.
«Hay muchas teorías, pero la que lo está pasando mal es Yadira», explicaba el periodista en la mesa de TardeAR, que explicaba que desde el Colegio de San Idelfonso han declinado hablar como representantes oficiales de la niña, cuyas redes sociales, así como las de su familia cercana, también habían revisado. En no pocos casos, contaba, estos familiares compartían el momento de la equivocación destacándolo como «lo mejor del año», tomándoselo a broma.
Con varios de ellos trató de hablar también, sin éxito: «Me han bloqueado muchos», reconocía Almansa, que sin embargo sí logra hablar con la madre de Yadira.
«La madre vive muy lejos. Me dice que está muy triste porque vive lejos y por vivir esto lejos de su niña, pero ha hablado con su hija», explica. «Son todo fruto de los nervios. Le quita la culpa al resto de teorías», afirma, junto a una petición muy clara: «La niña ha recibido muchos mensajes discriminatorios que le están haciendo mucho daño, y pide por favor que paren esas teorías, porque a la que le están haciendo daño es a ella, que no deja de ser una niña».
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