El Norte
Jueves, 19 de diciembre 2024, 13:45
Macarena Gómez expresaba durante la gala de los Premios Forqué 2024 su posicionamiento «muy en contra» de la ola de denuncias en redes sociales de casos de acoso y abuso sexual a mujeres por parte de hombres mediáticos y pedía «que pare ya» porque «hacen daño a las carreras profesionales de muchos hombres». Esas palabras le propinaron no pocas críticas, por lo que ahora se ha visto 'obligada' a emitir un comunicado y matizar sus palabras, mostrar su verdadera opinión y también pedir disculpas.
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La actriz ha querido reiterar que «como no puede ser de otro modo, estoy frontalmente en contra y condeno enérgicamente cualquier tipo de abuso o agresión, físico o psicológica, que lamentablemente sufren muchas mujeres hoy en día», lejos de lo que se pudieran interpretar en cualquiera de sus declaraciones a Europa Press que tanto se han viralizado.
Dos apariciones mediáticas que se han producido bajo el amparo de otro derecho que defiende como es «la libertad de expresión» y el «derecho a opinar por el canal o medio que cada uno considere oportuno» como el que hacen uso estas mujeres que denuncian públicamente lo que les ha ocurrido, aunque también recuerda la «presunción de inocencia» para estos hombres a los que se le acusa de cometer esos presuntos abusos y que únicamente deberían de ser juzgados en los tribunales «como garantes de la justicia, los derechos y las libertades».
Por ello, «como demócrata» considera que este tipo de agresiones lo que han de ser es «perseguidas y juzgadas por quienes tienen potestad par ello», por lo que anima a esas mujeres víctimas «a denunciar estos hechos ante las autoridades» quienes tienes la autoridad también de «castigar penalmente y con total contundencia a quien así lo merezca» y siempre bajo la propia Ley.
Unas palabras en consonancia de lo que también dijo su marido días atrás: «Que vaya a la Policía y no a Instagram. Que vayan a los juzgados y no a la tele. Que vaya a donde se tiene que ir para denunciar algo tan asqueroso como es un acoso, un abuso de poder, una violación (...) El problema es que, cuando tiramos demasiado de Instagram, estamos simplificando el discurso (...) y estamos creando también una especie de caza de brujas que para mucha gente ha sido injusta (...) Se ha de alzar la voz ante la injusticia, ante cualquier acoso, pero ante los canales correctos. No me vale un pantallazo en Instagram, lo siento. A mí me vale una denuncia y un juez».
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Por todo esto, Macarena Gómez lamenta «que mis palabras hayan podido ser malinterpretadas» y zanja así la polémica «reiterando mi apoyo y solidaridad con quienes hayan sido víctimas de una agresión o abuso». Por su parte su marido Aldo Comas simplemente ha compartido el stories de su mujer en su cuenta de Instagram.
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