Kanye West orina sobre un Grammy y declara la guerra a las discográficas

Esta movilización contra las discográficas tiene una explicación. «Quiero que mis hijos sean los dueños de mis disco» y no los hijos de los jefes de las discográficas. West, enfurecido, advirtió a Sony que los dardos también iban contra ella, «pero las guerras, de una en una». « Todos en Universal y Vivendi entended que voy a hacer todo lo que esté en mi poder legal y voy a usar mi voz hasta que los contratos de todos los artistas sean cambiados».

A partir de ahí, el rapero publicó 114 tuits en los que podían verse todas las páginas de los contratos que ha firmado a lo largo de los años con Universal. «Este momento va a cambiar la industria de la música para siempre. Me siento tan humilde y bendecido porque Dios me haya puesto en esta posición suficientemente importante como para hacer esto. Seguid rezando por mí, yo lo he hecho esta mañana».

Pero West, desatado, continuó escribiendo: «Me pregunto si Universal me va a llamar. Os prometo que tengo más ideas. No voy a parar, lo juro por Dios; todos los músicos debería de ser libres», y a partir de ahí comenzó a mencionar a grandes artistas de la talla de Bono, Paul (supuestamente McCartney), Drake, Kendrick e incluso a Taylor Swift, una de sus enemigas públicas desde hacer varios años. «Os necesitamos ahora mismo», implora.

¿Y cómo se ha tomado esta reacción su pareja, Kim Kardashian? Según ha confirmado una fuente próxima a ambos a 'Us Weekly', la defensa de Kardashian hacia su marido es total. «Quiere estar ahí para ayudarle. Hace todo lo posible por comprenderlo y saber de dónde viene el problema. Kim sabe que Kanye no es algo convencional y siempre lo ha sabido».