![Jordi Évole desvela cómo vive con su trastorno neurológico](https://s3.ppllstatics.com/elnortedecastilla/www/multimedia/2025/02/06/evole-kxhG-U230776570854AtD-1200x840@El%20Norte.jpg)
![Jordi Évole desvela cómo vive con su trastorno neurológico](https://s3.ppllstatics.com/elnortedecastilla/www/multimedia/2025/02/06/evole-kxhG-U230776570854AtD-1200x840@El%20Norte.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
El Norte
Jueves, 6 de febrero 2025, 10:45
Jordi Évole nunca ha escondido la enfermedad que padece. Se trata de la narcolepsia, un trastorno del sueño que afecta a su regulación, de tal forma que las personas pueden experimentar de repente, casi sin previo aviso y sin manera de controlarlo, una necesidad inmediata de dormir y «desconectan» por completo. El periodista ha hablado con Sonsoles Ónega de cómo esto le condiciona la vida a quienes lo padecen, pese a que él se considera «privilegiado». «Yo, por mi trabajo, aquí tengo una habitación especial para descansar y de hecho me tomo dos siestas por la mañana y dos por la tarde. Justo antes de hablar contigo me he echado un rato», ha explicado a la presentadora.
Ha sido en 'Y Ahora Sonsoles' (Antena 3), donde se ha mostrado esos momentos en vivo y en directo en los que Jordi Évole se llegó a dormir: desde 'El Hormiguero' a 'El intermedio', pasando por las grabaciones de sus programas, como un sonado momento que vivió con el grupo Estopa, que no daba crédito a lo que sucedía. Él ha señalado que suele ocurrirle en momentos muy concretos, por ejemplo, «cuando algo me hace mucha risa».
En el programa de Sonsoles Ónega ha estado una joven, Julia, que comparte trastorno neurológico con Évole: narcolepsia y cataplexia. Ella ha narrado momentos realmente difíciles: «Me dormí un día en la cocina, mientras tenía la sartén al fuego para freír. Al despertar estaba toda la cocina llena de humo y eso es un peligro». Le ha ocasionado problemas laborales y actualmente está de baja. «Trabajando como camarera un día, al alargarse la jornada me terminé quedando dormida y eso no se entendió, así que tuve que solicitar la baja», ha relatado.
Probablemente el momento más increíble en el que hizo acto de presencia esa narcolepsia fue cuando se casó con su actual pareja, pues terminó durmiéndose tras la ceremonia. «Yo había dicho ya al cura que hiciera una ceremonia corta, de unos 20 minutos, pero de camino a las fotos me quedé frita en el coche», ha recordado. Igual despidiendo el año, las uvas, momentos complicados que podrían ponerla en peligro por riesgo de atragantamiento.Julia ha compartido que ella necesita dormir al menos 15 horas al día, «a tramos, a ratitos. Pero es algo que no puedo controlar», ha sentenciado.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.