Fallece la influencer militar estadounidense Michelle Young a los 34 años

Michelle Young, influencer militar de 34 años, ha fallecido, de igual manera que hace tan solo cinco días lo hacía Mila de Jesús, de 35 años, también influencer, y que se hizo conocida por protagonizar una drástica pérdida de peso que ella misma mostró al mundo. Michelle Young era creadora de contenido norteamericana y soldado del ejército de los Estados Unidos, se ha quitado la vida, según ha informado el propio entorno familiar de la fallecida.

La joven, cuyo perfil en Instagram superaba los 100.000 seguidores, era un rostro muy conocido en el país especialmente por la defensa que hacía de la patria y el orgullo militar que abanderaba: se alistó en el ejército al cumplir la mayoría de edad y ha permanecido en sus filas durante 16 años, incluyendo dos visitas a Afganistán.

Sin embargo, por encima de todo, Young era madre. Precisamente a su hija Gracie, de tan solo 12 años, dedicaba su última publicación en redes sociales. «Feliz cumpleaños a la chica más dulce que he conocido. Es una fuerza a tener en cuenta: es ingeniosa, ambiciosa, amable, compasiva, inteligente, trabajadora y desinteresada», escribía hace tan solo cuatro días.

Tras su muerte, las amistades más cercanas de Young han iniciado una campaña de GoFoundMe para ayudar económicamente a la pequeña Gracie. «Las enfermedades mentales son muy frecuentes, especialmente en el ejército», ha dicho una de las amigas que ha apoyado esta iniciativa, Sarah Maine, añadiendo que «era un alma hermosa, una amiga increíble, una madre soltera, una soldado».

Desde que ingresó en el ejército, Young había luchado por un mejor tratamiento de la salud mental de los soldados norteamericanos y por asuntos en los que el sector militar sufre algunos perjuicios, como el poco acceso a la vivienda tras el servicio castrense. Además, solía ejercer un voluntariado en su vecindario que subía a redes sociales.

Una de sus últimas apariciones en este último campo fue durante la Semana de Prevención del Suicidio, el pasado mes de septiembre. Allí recordó cómo su hermano mayor se quitó la vida cuando ella tan solo tenía 14 años. Dos décadas después, es ella quien lo hace. «Desde fuera parecía que lo tenía todo. Es una prueba de que nunca se sabe por lo que alguien está pasando o contra qué demonios puede estar luchando. Nunca llenaremos los vacíos de nuestros corazones y siempre nos preguntaremos por qué», lamenta Maine.

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