Britney Spears. EFE

Britney Spears posa desnuda en la playa durante una escapada con su prometido

La cantante, de 40 años, confiesa estar viviendo una segunda juventud junto a San Asghari

el norte

Miércoles, 2 de marzo 2022, 13:38

Britney Spears, la cantante, de 40 años, que marcó a toda una generación, vive una segunda juventud tras recuperar su libertad y deshacerse del control de su padre. Además de haberse comprometido recientemente con Sam Asghari. La pareja disfruta como nunca de su independencia y lo muestra en sus redes sociales. Lo último que han publicado han sido unas fotografías en una playa nudista con una Britney completamente desnuda, imágenes retocadas para burlar la censura de las redes.

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Con 11 años participó en el programa de televisión 'The Mickey Mouse Club' con Justin Timberlake, Christina Aguilera y Ryan Gosling y con 16 encabezaba las listas de éxitos en 15 países con su sencillo 'Baby One More Time'.Éxito tras éxito la cantante empieza a entrar en una fase de descontrol en su vida personal. Del año 2004 al 2006 se casa en dos ocasiones -la primera, en las Vegas se anula tres días después- tiene a sus dos hijos y se divorcia. Incapaz de gestionar su éxito sufre un brote psicótico en 2007 durante el cual se rasuró la cabeza y atacó el automóvil de un paparazzi en una estación de servicio. A raíz del incidente, fue ingresada en el ala de psiquiatría de UCLA hasta que la justicia otorgó su tutela a su padre.

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Su poder de decisión sobre su vida acabó en 2008. Su carrera musical, su dinero, sus gastos, sus visitas, qué medicamentos tomar, o cualquier otro asunto relacionado con su vida eran determinados por su progenitor, Jamie Spears. Perdió también sus derechos legales y la custodia de sus dos hijos e incluso, según ella misma confesó, la posibilidad de tener más descendencia y de casarse. Tenía 27 años.

La artista volvió al escenario, publicó tres álbumes, apareció en varios programas de televisión e incluso fue contratada en una residencia en Las Vegas. Pero en enero del 2019 anunció de forma abrupta que dejaba indefinidamente las actuaciones en vivo y comenzó a quejarse de la tutela; primero a escondidas, enviando mensajes crípticos a sus fans, y luego ya públicamente.

El pasado mes de noviembre un juez de Los Ángeles daba por terminada la vigilancia de la cantante por parte de su padre. Britney Spears ya es libre para hacer y deshacer en su vida.

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