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el norte
Martes, 10 de agosto 2021, 12:09
Como los grandes vinos, Antonio Banderas envejece de la mejor forma posible, en lo más alto dentro del terreno profesional y enamorado como un adolescente de Nicole Kimpel, a quien el actor malagueño felicitó hace 11 días en las redes sociales: «Feliz cumpleaños, mi ... amor @nickykim2807».
Hoy, Banderas será quien reciba todo tipo de felicitaciones, la mayor parte procedentes de su España natal donde se encuentra completamente afincado, cosechando éxitos profesionales y personales. Con la resaca del triunfo de la Gala solidaria de Starlite, con su proyecto fetiche, el Teatro Soho, y la venta de su casa en Londres en marcha, Antonio sigue siendo un ejemplo de vitalidad y una fuente inspiradora para perseguir sueños de manera incansable.
Como recuerda Chance', a sus más de 60 años el actor malagueño ha cumplido muchos con dos ejes centrales en su vida. Málaga en el ámbito personal y Pedro Amodóvar en el profesional. El director manchego cambió la vida de aquel joven al que echaban de las pensiones mientras intentaba hacerse hueco en la movida madrileña con papeles en cintas como 'Átame', 'La ley del deseo' y 'Mujeres al borde de un ataque de nervios' con las que Antonio cosechó sus primeros reconocimientos y lo convirtieron en chico Antonio Banderas.
La buena sintonía entre Antonio y Pedro siempre ha sido una constante y 20 años después de los primeros papeles y del periplo estadounidendes del malagueño, actor y director se reencontraron en 'La piel que habito' y 'Dolor y Gloria', títulos que no han pasado desapercibido y han sido reconocidos con todos los galardones posibles.
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