Ana Obregón paseando con su amiga Susana Uribarri por las calles de Miami. Instagram

Ana Obregón ha dejado de lado el luto durante la visita de Susana Uribarri a Miami

La bióloga baraja la posibilidad de bautizar a su nieta después del verano

El Norte

Miércoles, 26 de abril 2023, 17:50

Ana Obregón sigue viviendo temporalmente en Miami desde que naciera su nieta Ana Sandra, aunque se espera que en unas semanas pueda estar en España con la niña, cuando consiga tener todos los papeles en regla.

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La bióloga, durante su estancia en Miami, ha ... contado con la visita de su representante y amiga Susana Uribarri, que además ha ido acompañada por su hija. La actriz se ha hecho eco de esta visita a través de las redes sociales compartiendo unas fotos y un mensaje muy revelador.

«Qué ilusión me ha hecho la visita de mi amiga del alma @susanauribarri y su guapísima hija @caruribarri. Reconozco que les ha costado arrancarme de casa y dejar a mi princesa por unas horas. Siempre juntas . Os quiero muchísimo», ha dicho, para añadir después: «Por cierto, he dejado después de tres años mi luto, solamente blanco y negro, porque mi corazón así lo sentía. Ahora ha llegado Anita y con ella ha traído todos los colores del arco iris a mi vida».

Cuando vuelva a España tiene varias cosas pendientes, como la promoción de su libro 'El chico de las musarañas', en el que relata la historia de su hijo, y la promoción de la nueva temporada de 'Mask Singer', dos motivos por los que además será entrevistada en 'El Hormiguero'. Del mismo, está inmersa también los preparativos del bautizo de la niña, aunque desde el medio El Español han desmentido que vaya a celebrarse en junio como se dijo. Todo apunta a que será después del verano.

El bautizo

El bautizo se celebrará en la parroquia de Nuestra Señora de La Moraleja. Mientras, desde la revista ¡Hola! se habían hecho eco de que la niña podría llevar el su bautizo el faldón de cristianar que llevó Aless Lequio en 1992. Ese faldón está custodiado por la familia de Alessandro Lequio, ya que se usó por primera vez el 26 de enero de 1938, en el bautizo de Juan Carlos de Borbón, y tiene mucho significado para los Torlonia. «La reina Victoria Eugenia se lo cedió a mi abuela, la infanta Beatriz, para que lo custodiara. Se presta y de nuevo regresa al palacio, donde se custodia hasta la siguiente ocasión», explicó Alessandro Lequio sobre dicho traje.

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