Homer Simpson ya tiene el voto decidido

Matt Groening, el creador de los Simpson, tiene la habilidad de adelantarse a la realidad. Como ejemplo, hace quince años ya decía que Donald Trumpo se presentaría como candidato a presidir los Estados Unidos. Incluso comentó que ganaría las elecciones y que llevaría al país a la quiebra. Pues bien, parece que ahora le ha llegado la hora de la verdad.

En el corto publicado por la cadena Fox, de apenas dos minutos, titulado '3 A.M.', se puede ver a Homer y Marge intimando en la cama hasta que ella, de repente, se detiene y le dice a su marido que no puede continuar hasta que decida a quién va a votar. En ese momento, Homer le comenta que hará su elección al modo americano. Así que enciende el televisor donde aparece un especio de propaganda política en el que preguntan al espectador: «Son las 3 de la mañana y el teléfono está sonando en la Casa Blanca. ¿Quién deseas que responda a la llamada?».

En la siguiente escena vemos a Bill Clinton, respondiendo sin darse cuenta de que no es para él, sino para su mujer, la actual candidata demócrata. Hillary coge el teléfono y le dice a Bill: «Sí, a partir de ahora siempre es para mí». Después aparece Donald Trump en la cama mientras lee «Los grandes discursos de Adolf Hitler», recibiendo otra llamada de emergencia. El candidato republicano, en cambio, no coge la llamada. Primero tuitea que está contento con el exilio de Elizabeth Warren, la senadora demócrata que recientemente le criticó, después le pide a su equipo que inscriba su nombre en el monumento a Lincoln, más tarde que haga que el gobernador de Nueva Jersey y exprecandidato a la Presidencia Chris Christie se coma un gusano, a continuación que disuelva la OTAN y, por último, que le hagan unos huevos revueltos. Después se somete a un tratamiento de rejuvenecimiento, con peculín incluido, y, por fin, atiende la llamada.

Después de ver este anuncio, Homer dice que votará por Trump, pero como Marge se irrita por la respuesta, cambia de opinión. «Así es como me convertí en un demócrata», asegura, antes de finalizar con un irónico mensaje: «Pagado por los estadounidenses que están empezando a extrañar a Obama».