Regresa a Cuatro 'Conexión Samanta' con el programa sobre los 'bebes reborn'
Son muñecos con una apariencia real, fabricados artesanalmente, por encargo
PPLL
Viernes, 30 de enero 2015, 13:35
'Conexión Samanta' se ha decantado por los 'bebes reborn' para comenzar una temporada en la que, según palabras de su presentadora Samanta Villar, han apostado por la excepcionalidad, por temas apenas tratados en televisión. Estoy muy satisfecha. Hemos sido exigentes a la hora de seleccionar los temas y hemos encontrado historias relevantes que pueden resultar muy interesantes para el espectador.
Los asuntos que se tratan en esta nueva etapa son temas novedosos, tanto que casi podrían ser exclusivas. Algunos son sorprendentes y reflejan realidades que merecen ser contadas. Además, hemos decidido hacer evolucionar el formato, explica Samanta Villar.
En la noche de ayer pudimos saber algo más de los Bebés reborn, unos sorprendentes muñecos por su realismo, tanto que se pueden confundir con bebés de verdad. En Bebés reborn descubrí la ternura que pueden despertar unos muñecos hiperrealistas. Si no te fijas, crees que son bebés reales, apunta Samanta.
Esta tendencia nació en Alemania, en plena II Guerra Mundial, cuando las madres se vieron obligadas a arreglar las muñecas de sus hijas ante la escasez de recursos. De allí pasó a Estados Unidos, donde ha dado lugar a un floreciente mercado que está viviendo su esplendor gracias a las redes sociales. Los reborn tienen un precio que oscila entre los 400 y 6.000 euros y las personas que los encargan hablan de 'adopción', no de compra.
A la hora de entregar un muñeco, se incluye una pulsera identificativa y un certificado de nacimiento que incluye el peso y el tamaño del bebé, así como los nombres de sus padres. Al margen del valor propio del objeto, pueden tener un valor terapéutico en el caso de mujeres que necesitan llenar el espacio de un bebé.
A este programa de los Bebes reborn les seguirán otros no menos interesantes sobre la intersexualidad (personas que nacieron con órganos sexuales ambiguos y que hasta la pubertad no descubrieron su identidad sexual real) y el Trastorno de Conducta Alimentaria (TCA) masculino.
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