Consulta la portada del periódico en papel
David Gandy

David Gandy, el modelo que hace frente a las supertops

Este joven británico de 34 años se ha convertido en la gran estrella masculina de una industria en la que hasta ahora sólo brillaban las mujeres

PPLL

Lunes, 23 de junio 2014, 14:19

Desde que David Gandy se colase en una fiesta de Dolce&Gabbana, su vida y la de las grandes supermodelos cambiaron para siempre. Este joven británico de 34 años de edad les plantó cara y luchó por ser como ellas.

Publicidad

Gandy se ha convertido, desde hace años, en el maniquí que luce los 'slips' más ajustados. Los diseñadores italianos llevan años apretando las partes íntimas de este británico del que nadie diría que se gana la vida promocionando perfumes al verle navegar por las aguas del mar Tirreno con un minúsculo bañador casi dos tallas más pequeñas que la suya.

Gandy no solo se ha convertido en el hombre más deseado del planeta. "Tengo una nariz enorme y unas orejas gigantes, y me temo que son las tres únicas cosas que seguirán aumentando de tamaño", ironizó recientemente en una entrevista en la revista 'Vanity Fair'. Se ha convertido en la gran estrella masculina de una industria en la que hasta ahora sólo brillaban las mujeres. Sus emolumentos se acercan ya a los de las supertops. Pero no todo se lo debe a su apolínea figura. "Sería un idiota si fuera diciendo 'vaya, soy espectacular'", reflexiona.

Al margen de D&G, otros diseñadores como Carolina Herrera y Ermenegildo Zegna, o fotógrafos como Steven Klein y Steven Meisel se lo rifan. "Hay que saber adaptarse y cambiar, pero, sobre todo, hay que decir que no a muchos proyectos».

El atrevimiento de este joven fue el responsable de que ahora sea uno de los modelos mas codiciados del mundo. Cuando se enteró de la fiesta que había organizado Dolce&Gabbana para celebrar el cumpleaños del fotógrafo e íntimo amigo suyo, Mariano Vivanco, trazó "un plan" con su agente para colarse "como fuera" y conocer personalmente a los creadores italianos. Finalmente, se coló y al verle los modistos exclamaron: "¡Ah, guapísimo!". Y desde aquella fiesta han pasado ocho años y al binomio Dolce&Gabbana se le podría añadir Gandy. Le han hecho de la familia y no le pierden el rastro, pese a que David tuvo que derribar muchos muros.

Publicidad

Modelo viril

A finales de la pasada década , los modelo debebían ser delgados y andróginos, una tendencia que no iba con Gandy que era el 'hazmerreír' de la profesión. "No me servía. Mis compañeros intentaban adelgazar, pero yo sabía que con mi altura y anchura nunca podría llegar a ser menudo", razona. Pese a todo, David se obcecó y decidió "fortalecerse" más. y consiguió que las firmas más reputadas cambiasen las tendencias. También logró acabar con la 'imagen elitista' del diseño masculino y lo acercó a la calle. "Jude Law, Beckham y yo hemos demostrado que uno puede cuidar de su imagen sin que ello tenga una connotación gay. Robert Redford, Paul Newman y Steve McQueen representan mi idea del hombre-hombre. Mi concepto de la masculinidad viene de la vieja escuela", argumenta.

Gandy reconoce que "detesta" a los colegas que se ganan la vida haciendo únicamente catálogos. Él aspira a trabajar "sólo con los mejores" y a crear "algo icónico como hacen las supermodelos. Nunca he entendido por qué otros hombres no lo han intentado".

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad