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La familia Thyssen
Tita Cervera y su hijo Borja, entre el amor y el odio

Tita Cervera y su hijo Borja, entre el amor y el odio

La baronesa ha llamado en varias ocasiones a su hijo para felicitarle por su futura paternindad, aunque entre ellos todavía tienen un juicio pendiente

PPLL

Jueves, 19 de junio 2014, 19:16

Después de una década de desencuentros, los Thyssen parece que han fumado la pipa de la paz. Parece que madre e hijo pronto podrían volver a ser una familia unida... con Blanca Cuesta, incluida.

En las últimas semanas, Tita y Borja se han reunido, sin la presencia de Blanca, en el Museo Thyssen. "Parece que hay indicios de que vamos a ser felices mi hijo, yo, sus hijos y su mujer", comentó la baronesa en la inauguración de una nueva exposición en su museo de Málaga.

Este distanciamiento comenzó cuando Borja conoció a Blanca, una modelo catalana portada de 'Interviú' y siete años mayor que él. Para la condesa no era la chica ideal para su retoño. La total disconformidad llegó en marzo de 2004, cuando a Blanca le "robaron" unas fotos que acabaron en la portada de Interviú. . En ese artículo la nuera de la baronesa presumió de pechos operados y pagados por Tita, lo que provocó el enfado de la baronesa y que la relación entre Borja y Blanca se acabase.

Dos años después, Borja percibió 5 millones de euros, un dineral que le alejó de su madre. En ese momento, Blanca volvió a posar desnuda en su exclusivo casoplón de Ibiza. Lo que provocó una nueva discusión entre madre e hijo.

Pero en el 2007, Blanca y Borja se casaron (con separación de bienes), estando ella embarazada de seis meses y después de diez años de noviazgo. Otro paso más que les alejó de la baronesa que ya empezó a hablar de su nuera, haciendo comentarios como "Ella le lleva bastantes años, empezaron a salir cuando él tenía 17 y era menor. Borja era un chico monísimo, elegante. Ella no le ha ayudado a ser un hombre y en su lugar le ha puesto a hacer pesas, a hacerse tatuajes y a raparse el pelo al cero. Tiene una mentalidad distinta a aquella con la que yo eduqué a mi hijo. He intentado ser amiga de ella durante todos estos años, pero no me ha hecho caso".

Un año después nació Sacha Thyssen Cuesta, el primer hijo de la pareja. Tita fue a visitarle a la clínica para después acabar poniendo en duda que Borja fuese el padre, por lo que se le realizaron hasta cinco pruebas para demostrar que Sacha era su hijo. Carmen Cervera dismintió con un extraño argumento su vinculación en el asunto: "Fue ella (Blanca) la que quiso la prueba de paternidad a cambio de una casa de seis millones de euros. Yo nunca la pedí". Luego lo admitió: "Efectivamente sí que le dije a Borja que me gustaría que se la hiciera. (...) Y si es verdad que se lo ha hecho quiero ver un papel oficial de un laboratorio con la firma de un especialista".

El punto más fuerte de estos enfrentamientos llegó cuando Borja y Blanca fueron 'pillados' por unas cámaras de seguridad mientras extraían sin autorización documentación privada perteneciente a Tita. La baronesa denunció a su hijo al considerar que había desvelado asuntos internos y documentos de su propiedad. Incluso dijo que Borja pertenecía a "una secta que le reclama dinero, con muchos gastos, con gente extraña a su alrededor; ha contratado a una asesora de imagen, me impiden verle, poder hablar con él... Está abducido".

Ahora, llega el último episodio de esta historia, con la supuesta reconciliación "Ojalá podamos estar todos juntos este verano", ha deseado la baronesa, a quien le gustaría pasar las vacaciones con su hijo y su nuera navegando juntos por las cristalinas aguas de Cerdeña.

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