15 fotos

15 rincones medievales de Castilla y León

Martes, 4 de agosto 2015

Aguilar de Campoo (Palencia). Pueblo de cántabros, romanos y visigodos, en la Edad Media fue una importante villa de la que quedan restos de su muralla. Rico en patrimonio con su castillo, el importante Monasterio de Santa María la Real, la iglesia de Santa Cecilia y la Plaza Mayor, con la silueta de la iglesia de San Miguel, y los palacios y casas solariegas con vistas a la belleza que regala el río.

Peñaranda de Duero (Burgos). Conjunto Histórico desde 1974, su casco histórico aglutina monumentos de arquitectura popular castellana. La Plaza Mayor, o Plaza de los Duques de Peñaranda, se consolida en el siglo XVI con la construcción del Palacio y la Colegiata por parte de los Terceros Condes de Peñaranda. Destaca también el castillo en la parte más elevada del cerro.

Calatañazor (Soria). Pueblo amurallado que en su parte más alta contempla el castillo. Desde su Torre del Homenaje se divisa todo el valle. Las construcciones se aglutinan en torno a su calle principal, porticada, que llegaba hasta la plaza de Armas, luego Plaza Urbana; donde se observan construcciones típicas de Tierra de Pinares, creadas con madera, barro y piedra.

Frías (Burgos). Conjunto Histórico con un casco antiguo estratégico, encaramado en un alargado peñasco, reinando su Fortaleza en un extremo, y la Iglesia San Vicente en el otro. Sus calles se dibujan paralelas al borde de las laderas, rodeando el cerro, y en alguna ocasión las casas se dibujan colgadas ante la pendiente.

Sepúlveda (Segovia). La Villa medieval de Sepúlveda fue en su día, la 'Villa de las Siete Puertas', por las que daba paso entre su muralla fortificada y castillo. Entre sus riquezas destaca la antigua cárcel, actualmente parte de la oficina de turismo, situada en la Iglesia de los Santos Justo y Pastor, frente al Ayuntamiento, y a pocos metros la Plaza de España, núcleo de la Villa, en cuyos laterales se aprecian los torreones del castillo.

Covarrubias (Burgos). Destacan sus plazas y espacios del casco antiguo, la Plaza de Doña Sancha, Doña Urraca, Rey Chindasvinto y Obispo Peña. En su arquitectura urbanística destaca la madera acompañada de barro o piedras, típicas casas serranas de Castilla, típicos, también, sus balcones bolados y protegidos por cubierta.

Pedraza (Segovia). Su época de mayor esplendor se dio en los siglos XVI y XVII siglos de que datan la mayoría de las casas y palacetes que embellecen el interior de la Villa y hacen tan hermoso su caminar, aún de empedrado medieval. Su gran esplendor se debe a la lana merina y excelentes tejidos, capaces de competir con los de Flandes.

Castrillo de los Polvazares (León). Es uno de los pueblos más hermosos de la comarca leonesa de la Maragatería. Un pueblo de calles empedradas y casas blasonadas que fue declarado conjunto histórico artístico y que conserva íntegra su arquitectura popular. La piedra y arcilla roja de sus fachadas contrasta con los vivos colores de los portones y ventanas: azules, verdes y blancos.

La Alberca (Salamanca). Se ubica al sur de la provincia de Salamanca, es el pueblo serrano por excelencia, dominado por la silueta de la Peña de Francia (sobre la que se encuentra el santuario de la Virgen Negra), y la Sierra de Gata. En él encontramos un trazado mezcla entre judaico y árabe como los más claros exponentes de la arquitectura serrana de toda la provincia, además de un privilegiado paisajes.

Puebla de Sanabria (Zamora). Lugar estratégico, de unión entre Castilla y Galicia. Pueblo cercano al Lago de Sanabria, el mayor de origen glaciar de España. En el siglo XII Puebla se repuebla como centro organizador del territorio circundante. En 1220 se convirtió en lugar fortificado defensa de los reinos leoneses frente a Portugal, siendo en el siglo XIII una de las más importantes plazas de armas del reino. Fueron los Condes de Benavente quienes levantaron su castillo, creciendo fuera del recinto amurallado el arrabal de San Francisco, propio de lugares donde los recintos se quedaban pequeños.

El Burgo de Osma (Soria). Lo que fue su catedral es el origen de su plaza, donde se aprecian los característicos soportales medievales de las villas de mercado y sus calles. Su catedral gótica está asentada en lo que en principio iba a ser románica, con tesoros artísticos en su centro catedralicio.

Ayllón (Segovia). Al nordeste de la provincia de Segovia, limitando con Soria, Guadalajara y Burgos, se encuentra la Villa de Ayllón, junto a la Sierra que lleva su mismo nombre, y responsable del color característico de esta zona. De especial interés son su Plaza Mayor, sustentada sobre soportales de madera; el Ayuntamiento, antiguo Palacio de Los Marqueses de Villena; sus edificios civiles como el Palacio del Obispo del Vellosillo, el de Los Contreras o el de Eugenia de Montijo o sus edificios religiosos como la antigua iglesia románica de San Miguel o la Iglesia de Santa María la Mayor.

Peñalba de Santiago (León). El pueblo, erguido sobre una peña, a la que debe su nombre, en los inviernos de nieves se cubre por un manto blanco sobre el que se alza la iglesia de Santiago, de puro estilo mozárabe, declarada Monumento Nacional en junio de 1931.

Urueña (Valladolid). Desde la localidad se contemplan hermosas vistas de la meseta castellana. Núcleo clave en la edad media como frontera entre Castilla y León. Dos puertas permitían el acceso: la del Azogue, y la Puerta de la Villa con arco apuntado. Su castillo aparece como la torre mayor de tan hermosa fortificación. En el interior de la Villa sus viviendas son humildes y sus calles preparadas para cumplir su función el paso de personas y carros. Un lugar que aún conserva en perfecto estado el recuerdo y la cultura de su pasado.

Arévalo (Ávila). Situada en la lengua que forman los ríos Arevalillo y Adaja, unidos bajo el Castillo, es una importante muestra del mudéjar abulense. Lugar que ha visto pasar diferentes culturas: cristiana, musulmana y hebrea, siendo así una de las juderías más importantes de Castilla.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad