Ganaron las redes sociales

Ya nadie puede concebir unas elecciones sin redes sociales, igual que nadie puede ya seguir un programa de televisión sin la conversación paralela que se genera en el mundo 2.0, un partido de fútbol sin las ironías de Twitter o Eurovisión sin los memes y parodias. Porque ayer, el debate que se originó en redes sociales superó en ocasiones la tensión y el interés de una jornada en la que la multiplicidad de factores no solo alteró el producto sino que sumergió los comicios en un barro de expectación que no se vivía en España desde hace muchos años.

Los partidos eligieron las redes sociales para tuitear fotos y más fotos de candidatos y militantes ejerciendo su derecho al sufragio bajo el consensuado hashtag #Hevotado. Muchos cayeron en un pozo de silencio a las ocho en punto de la tarde, dando muestras de gratitud y buenas intenciones cuando el pescado aparentemente estaba vendido.

Y si la victoria corriera paralela al éxito en las redes sociales, Alberto Garzón hubiera ganado las elecciones con mayoría absoluta. La estrategia de UP-IU en redes sociales puso ayer la guinda a una campaña de quitarse el sombrero colocando a su etiqueta #Garzoners en lo más alto del trending topic mundial. En el anecdotario viral de la jornada, no podemos obviar ese tuit de Rosa Díez (UPYD) que, sobre las diez de la noche escribió un escueto, enigmático y sobrecogedor «no» que borró poco después. Aunque el tuit más criticado fue el del Ministerio de Interior que, a las 12:00 horas, colgó una foto de Adolfo Suárez votando y otra de Mariano Rajoy, también depositando la papeleta en la urna con el siguiente texto: «Entre estas dos imágenes han pasado 38 años de historia democrática en España». Y como Twitter nos tiene acostumbrados a ese punto de mala baba que tanto abunda entre sus acólitos, el tuit resucitado del día fue uno de Pedro Sánchez que publicó en 2012 una foto jugando a La Oca con sus hijas y el texto «Vaya paliza me están dando...».