Extremadura mira a las próximas elecciones en Castilla y León prestando más atención a los detalles que al cuadro general. No interesa tanto quién gane, pues las realidades de los partidos mayoritarios, PP y PSOE, en ambas comunidades son bastante diferentes, como lo que ... ocurra con los que han tenido o pueden tener las llaves de la gobernabilidad, en especial si se consuma el derrumbe de Ciudadanos por la posibilidad de que se replique esa caída en los próximos comicios a la Asamblea de Extremadura. También hay un ojo puesto en lo que haga Vox y en su previsible crecimiento en Castilla y León, donde, al igual que ocurrió en Extremadura, obtuvo unos resultados muy pobres en las autonómicas de 2019. Buena parte de la comunidad castellanoleonesa comparte además con la extremeña el problema del despoblamiento, con extensos territorios alejados de los centros de decisión a los que aspira a representa políticamente la coordinadora que, bajo el nombre de España Vaciada, por primera vez se lanza a participar en unas elecciones. El éxito o el fracaso de la propuesta puede tener una influencia decisiva para que los numerosos colectivos similares que actualmente se agrupan en la plataforma Extremadura Vaciada, filial de la nacional, den el paso y se animen a reclutar candidatos y presentar sus propias listas dentro de año y medio, algo nada fácil dada la heterogeneidad de un movimiento del que forman parte desde la plataforma Milana Bonita, que nació en 2017 para reivindicar un tren digno, hasta la Confederación de Asociaciones de Vecinos de Extremadura.
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