Elecciones municipales en Valladolid

La Rondilla: las secuelas de un barrio levantado a toda prisa

Todas aquellas personas necesitaban casa y había empresarios dispuestos a hacer negocio con viviendas apiñadas, sin ascensor, sin garaje, sin dotaciones casi en el barrio.

Aquel origen apresurado y especulador de La Rondilla ha condicionado su desarrollo posterior y, pese a las muchas mejoras (la mayoría impulsadas gracias a la lucha vecinal), todavía hay cuestiones que, arrastradas desde entonces, les afectan. Como la falta de aparcamiento o de espacios verdes. Como la complicada movilidad.

«Queremos para el barrio una movilidad sostenible, que nos permita desplazarnos de forma cómoda, con una ordenación del tráfico que evite las congestiones en calles como Soto o Cardenal Cisneros», explica María de la Concha Morán Vaquero, presidenta de la asociación vecinal Rondilla, que ha presentado cuatro grandes reivindicaciones a los partidos políticos de cara a las próximas elecciones. La primera tiene que ver con el medio ambiente: apela a las energías limpias, a la extensión de las comunidades energéticas, a las medidas en favor de las bajas emisiones («aquí en la zona sufrimos el polvo negro»).

La segunda apunta a las viviendas sociales. La tercera está vinculada con los servicios sociales («mayor apoyo a la Fundación Rondilla y a las políticas de integración con los colectivos vulnerables, control de las casas de apuestas») y la cuarta mira hacia la participación ciudadana, «con ayudas a los colectivos que trabajan en el barrio».

Esta última petición es vital para Elena de la Fuente, portavoz de la Asociación de Mujeres de La Rondilla. «Hay que fortalecer el tejido asociativo de los barrios, que en algunos casos tienen que afrontar proyectos muy necesarios sin apenas financiación. Vemos cómo muchas de las ayudas se las llevan colectivos que se han constituido en empresas y se deja de lado a las asociaciones que tanto han trabajado en la zona», dice De la Fuente, en un llamamiento no solo a los partidos que optan al Gobierno municipal, sino también al resto de las administraciones.

Miguel Ángel Cojo, presidente de la asociación El Refugio, recuerda las dos grandes reivindicaciones de los vecinos de la zona de Hospital. La primera apunta a las obras de Madre de Dios, un proyecto para la reforma de la calle que desde hace años ronda los despachos municipales. La segunda es todavía más sangrante: el centro de salud de La Magdalena, una inversión que la zona reivindica desde hace más de quince años y cuya obra se encuentra paralizada desde hace casi tres. La inversión corresponde a la Junta, «pero no podemos dejar pasar una campaña electoral sin recordarlo», dice Cojo.

José Fuentes, del restaurante Amador y uno de los portavoces de la hostelería en el barrio, insiste en los problemas de aparcamiento y en cómo eso impacta en sus negocios. «Hay calles, como Soto, donde el tráfico se ha vuelto casi imposible. Al eliminar uno de los carriles, se ha generado un embudo con la calle Mirabel», cuenta Fuentes, quien también reclama mayores puestos de carga y descarga. «En esa esquina con Mirabel, en la entrada del parque, se aparcaba un segundo y servía como vía de escape. Pero han puesto una jardinera que lo impide», indica el hostelero, quien reclama además una ordenanza de terrazas «más clara para todos».

Ana Belén Mucientes, portavoz de los comerciantes de Santa Clara (dependiente de Fecosva), también apunta al tráfico como una de sus preocupaciones. «Estamos muy cerca del centro, y nos tememos que la implantación de la zona de bajas emisiones nos afecte. Si se va a limitar el acceso al casco histórico, muchos de esos coches circularán por estas calles, ya muy saturadas, o buscarán aparcamiento por aquí, donde ya no hay sitio», apunta Mucientes, quien augura que eso puede afectar al comercio de proximidad en beneficio de los centros comerciales. Además, reclama una intervención en la avenida de Palencia que la convierta «en un bulevar más atractivo».

«En el barrio, por su diseño, hay pocos garajes. Además, con el tiempo se ampliaron aceras y se eliminaron plazas de aparcamiento», cuenta Javier Serrada, portavoz de los comerciantes de las galerías comerciales de La Rondilla, quien insiste en esa necesidad de favorecer el estacionamiento a los clientes («Una solución podría ser reservar tres o cuatro plazas cercanas») y potenciar servicios de autobús y aparcabicis, «por ejemplo en Tirso de Molina». Confía en que las galerías, actualmente en obras, puedan abrir a lo largo de este año. «Nos dicen que para agosto, pero quizá se retrase. Ojalá que se cubran todos los puestos», concluye.

PP

No ha facilitado las propuestas de su programa electoral para el barrio.

PSOE

«Reformas de la avenida de Santa Teresa, de la plaza Alberto Fernández y de la calle Madre de Dios».

«Polideportivo en el IES Juan de Juni».

VTLP

«Zonas de sombreado en el parque Ribera de Castilla».

«Arreglo del Patio de la Convivencia, muy degradado».

«Reforma integral de aceras y calzadas en algunas calles interiores en Hospital».

«Programa radares contra la soledad no deseada (puesta en marcha de un programa de apoyo al envejecimiento activo y de seguimiento social de la soledad no deseada, que junto a la municipalización del servicio de atención al domicilio dignificará la atención dispensada a las personas mayores)».

«Ampliación del programa de apoyo de Comunidades Energéticas Locales mediante la cesión de cubiertas municipales y el asesoramiento para la generación y uso local de energía renovable en manos de las personas».

Vox

«En una zona muy problemática para aparcar, no tiene sentido eliminar 20 plazas de aparcamiento de superficie por las estaciones de alquiler de bicicletas BIKI. Provisionalmente, retiraremos las estaciones de alquiler y trataremos de llegar a un acuerdo con el Arzobispado para poder utilizar parte del espacio del Seminario para plazas de aparcamiento de residentes a un precio tasado. Como solución definitiva, construiremos un aparcamiento subterráneo en la calle Amor de Dios también para residentes».

«Instalación de badenes en los puntos negros del barrio para reducir la velocidad de los vehículos y así evitar los atropellos».

«Instaremos al Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones para que concluyan las obras del nuevo centro de la Seguridad Social en el suelo del antiguo colegio de San Juan de la Cruz o que revierta su propiedad al municipio».

«Mejoraremos el mantenimiento de los elementos urbanos».

«Utilizar los espacios verdes del Parque Riera de Castilla para actividades de ocio para los residentes del barrio».

Ciudadanos

«Apoyo a los proyectos de la Fundación Rondilla para conseguir un barrio en el que la convivencia en la diversidad sea una realidad».

«Implantación del contenedor amarillo».

«Revisión de la iluminación para dotar al barrio de una mayor iluminación en aquellas calles, plazas y avenidas más oscuras».

«Modificar la Ordenanza que regula los mercados municipales para reducir o bonificar las tasas, y favorecer así, la implantación de emprendedores que permitan llenar los puestos del mercado de la Rondilla, aprobando también una flexibilidad de las actividades permitidas y productos vendidos en ellos».

«Política de vivienda social para que todas las personas puedan contar con una vivienda digna».

«Ampliación del límite de precio de compra de vivienda por parte del Ayuntamiento hasta los 150.000 euros para que el parque público de vivienda para alquiler se encuentre diseminado en todos los barrios de la ciudad y evitar la creación de guetos».

«Instalación de nuevas estaciones de medición del nivel de contaminación del aire en el centro y barrios de nuestra ciudad».

«Movilidad sostenible, para conseguir mejoras en los desplazamientos dentro y fuera del barrio. Apoyar las medidas que favorezcan al peatón y al empleo de la bici. Que el Ayuntamiento realice un estudio sobre la ordenación del tráfico en el barrio y peatonalización de algunas calles».

«Aumentar la plantilla de los CEAS. Crear un servicio / asesoría para la  prevención de suicidios, depresiones, acoso y otras situaciones específicas».

«Realizar un censo de las personas que viven solas en el barrio».