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Ana B. Hernández
Viernes, 30 de junio 2023, 10:55
María Guardiola será la presidenta de Extremadura pero no gobernará en solitario sino en coalición con Vox. La líder regional del PP ha cedido finalmente, al permitir la inclusión de los de Santiago Abascal en el Ejecutivo, para poder cumplir con el mandato de Génova: ... no perder la Junta, evitar la repetición electoral y alcanzar el pacto antes de la investidura del socialista Guillermo Fernández Vara.
El acuerdo de gobierno ha sido posible, por tanto, por la cesión de la presidenta del PP, pero también por la rebaja de Vox en sus exigencias. Esta formación tendrá la Consejería de Gestión Forestal y Mundo Rural, como ha anunciado la formación en el comunicado que ha hecho público para adelantar el pacto en Extremadura, pero en manos de los populares quedarán las dos que los de Abascal venían reclamando, tanto la de Cultura como la de Agricultura, según fuentes consultadas por este periódico.
No obstante, además de Gestión Forestal y Mundo Rural o, lo que es lo mismo, asuntos concernientes a la lucha contra los incendios, la caza y la pesca entre otros, Vox también tendrá acceso a otros cargos. Tal como recogía la primera oferta del PP a la formación, se quedará con el puesto de senador autonómico que corresponde a los populares extremeños y está previsto que se lleve a cabo una modificación del reglamento de la Asamblea para que accedan a la Mesa con dos puestos. Cabe recordar que la ultraderecha quedó fuera del órgano de control de la Cámara, que contra todo pronóstico logró el PSOE, porque entonces PP y Vox no habían alcanzado ningún acuerdo y votaron por separado a sus respectivos candidatos.
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Luis Expósito y Ana B. Hernández
Respecto al acuerdo programático, recogido en 60 medidas como ha avanzado Vox, fuentes consultadas adelantan que contendrá «diferencias sustanciales» con respecto a los acuerdos alcanzados por las dos formaciones en otras comunidades autónomas. Hasta el momento, en Baleares, donde el PP gobernará en solitario, y en la Comunidad Valenciana, donde lo hará en coalición con Vox al igual que en Extremadura porque allí también a los populares no le bastaba la abstención de los de Abascal, sino que necesitaban su voto a favor.
Aunque ambos partidos mantienen sintonía en muchas medidas, especialmente las económicas, falta por ver cómo se recogen, si se recogen, los puntos en los que María Guardiola ha venido marcando las mayores diferencias con Vox: la violencia machista, los derechos del colectivo LGTBI y la inmigración. En los acuerdos de Baleares y la Comunidad Valenciana, Vox mantiene el término 'violencia intrafamiliar'. Pero, en el caso de las islas, el acuerdo dedica varios apartados a abordar la violencia contra la mujer. Establece que «se garantizará toda la asistencia, apoyo y lucha frente a la violencia contra las mujeres, trabajando en la prevención, identificando las causas y los perfiles repetidos de los agresores».
Está por ver qué recoge finalmente el acuerdo alcanzado en Extremadura en apenas 24 horas. Fuentes consultadas aseguran que ha sido posible porque el mandato de los líderes nacionales de PP y Vox estaba claro, había que lograr el pacto y hacerlo rápido, y que por eso las conversaciones se aceleraron cuando la presidenta de la Asamblea, la socialista Blanca Martín, rechazó la petición de María Guardiola de retrasar la investidura de Guillermo Fernández Vara. Fijó los días 5 y 6 y desde Madrid se instó a los dirigentes extremeños a sentarse a hablar y acordar en el menor tiempo posible. Para entonces en Madrid y en Extremadura ya se sabía que la solución pasaba por un gobierno de coalición. Solo faltaba ver cómo se conformaba.
El acuerdo se cerró anoche después de que Feijóo dijera públicamente que el pacto corría prisa y de que Abascal avisara que el acuerdo balear no se trasladaría a Extremadura. María Guardiola y Abel Bautista, por parte del PP, y Ángel Pelayo Gordillo e Ignacio Hoces por Vox, los mismos que protagonizaron la primera negociación fallida, son los que volvieron a las conversaciones, esta vez sobre todo telefónicas, y han cerrado ahora sí un pacto que convertirá a Guardiola en presidenta de la Junta de Extremadura, pero al frente de un gobierno en el que estará Vox.
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