Debate en Valladolid: un Gobierno bicéfalo contra aspirantes en construcción

En los debates preelectorales es habitual el disparo a bocajarro de todos los candidatos hacia quien ostenta el bastón de mando. En este caso, Óscar Puente y María Sánchez, aunque con pesos diferentes en el equipo de Gobierno, duplican ese frente de resistencia. Y ante eso conviene acudir más reforzado que con un esbozo de programa. La candidatura de Jesús Julio Carnero (PP) aún es un proyecto en construcción, Irene Carvajal (Vox) se quedó en apuntes y se diluyó en el debate más puro, y Pablo Vicente (Cs) quiso resumir todo su programa electoral y acabó diciendo que tampoco habría sido malo que Switch, como había hablado antes de que Puente ofreciera la alternativa, se instalara en Arroyo.

En el duelo aspirantes-Gobierno a Jesús Julio Carnero le fallaron las alianzas y se le quedó corto de concreción el programa. «Las zonas de bajas emisiones deben quedar reconducidas a la mínima expresión, que cumplan con la legalidad vigente y no más. Para que haya sostenibilidad ambiental necesitamos sostenibilidad económica y social, que haya gente», dijo. Y María Sánchez le replicó con una andanada a la candidatura popular: «Me sorprenden expresiones que hablan de cumplir la ley a la mínima expresión. En el Ayuntamiento en estos 8 años las sentencias judiciales son a favor y anteriormente -en referencia a la última etapa de Javier León de la Riva- eran en contra. Eso da certezas y seguridad jurídica».

Atacaba a la zona de bajas emisiones (ZBE) Irene Carvajal, con argumentos que hilan bien con la tendencia de Vox a nivel nacional: «Según está proyectada, es un grave riesgo para actividades comerciales, educativas, sociales, de Valladolid. Tiene como único objeto demonizar el uso del vehículo privado. No queremos imposiciones de élites europeas que no han aprobado nuestros ciudadanos. Proponemos trasladar los carriles bici a ámbitos más favorables, aprovechando los corredores verdes de la ciudad», decía. Y María Sánchez: «En el último Pleno, Vox propuso una zona de bajas emisiones que era fraude de ley». Y Óscar Puente: «La dimensión de una ZBE debe servir a los objetivos de la norma, reducir gases nocivos para la salud. La hemos definido a partir de informes técnicos. Alicante, con gobierno del PP, ha definido una ZBE del doble de Valladolid, con 30.000 habitantes más. PP y CS la defienden. El 20% de la superficie de Alicante está dentro de la ZBE».

Lejos de ser un 'pim-pam', el debate a cinco se configuró como un 'pim-pam-pam'. A cada ataque de aspirante, dos respuestas de los defensores del título.

Los aspirantes, por ahora, apelan a las tripas. Al sentimiento. A una idea. Como la del soterramiento. «Es una idea, pero no un proyecto porque no hay proyecto», atacó María Sánchez, que les pidió plazos, financiación. Concreción. El dúo de Gobierno se agarra a los datos para defender su gestión. Incluso cuando uno de los socios muerde al otro. «Hemos remunicipalizado el agua y hoy ingresamos 13 millones en lugar de 5 que ingresaba el Ayuntamiento cuando estaba en manos de la iniciativa privada», se atribuyó Puente ante la mirada seria de María Sánchez, que en el desayuno informativo de hace semana y media recordaba que fue VTLP quien impulsó esa remunicipalización, mientras que el PSOE defendía una opción mixta, público-privada.

Y Jesús Julio Carnero buscaba argumentos. «Hace falta liderazgo», repetía. En el soterramiento, en la defensa del sector de la automoción. En defensa de los autónomos, para los que sí desgranó algunas iniciativas programáticas: «Un punto de atención virtual las 24 horas, un observatorio de financiación con Iberaval, rebajas fiscales temporales y selectivas para autónomos, que se llevaba en el programa PSOE y no se ha puesto en marcha». Para retener y recuperar el talento emigrado, «con un instituto de Inteligencia Artificial» junto a la UVA y la Cámara de Comercio.

Al candidato del PP le van a buscar las vueltas por dos vías. Una, con el pasado. Con Ramiro Ruiz Medrano como director de campaña y Mercedes Cantalapiedra y Alberto Gutiérrez Alberca en la lista, que cierra en el puesto 27 Javier León de la Riva a título simbólico, no faltaron las invectivas a los proyectos anunciados y no realizados en los 20 años del PP al frente del Ayuntamiento. «Se alude a un vídeo mío de 2011», le dijo Puente. «Un dato fundamental es que yo estaba en el mismo barco que Javier León, pero no sabía que en enero había firmado una comfort letter por 100 millones y que la deuda de la Sociedad Alta Velocidad era de 400 millones».

El otro flanco por el que le llegarán los ataques a Carnero es el de su dualidad como consejero-candidato. «La comunidad autónoma lidera el éxodo de jóvenes. Vive fuera el 18,5% de los menores de 30 años, debe ser responsabilidad de la gestión del Gobierno autonómico. Castilla y León pierde en 2022 casi 3.000 autónomos. Desde el ámbito municipal hay que ponerle remedio, pero poniéndose las pilas todas las administraciones», le lanzó María Sánchez.

Irene Carvajal, que aspira a ser socia de Gobierno de Carnero si el bloque de derechas suma, preparó las cuestiones previstas pero eludió el barro de la discusión salvo para disentir sobre el IBI de Valladolid con el alcalde, Óscar Puente. Demasiado poco para ayudar al que puede ser su futuro socio, que se vio entre dos fuegos y sin escolta. Trató de defender la gestión pasada del soterramiento cuando Puente le recordó que en 2011, cuando se firmó la 'comfort letter', formaba parte del Salón de Plenos. «El 27 de la lista -Javier León- conforma el proyecto de integración ferroviaria con cuatro fases: llegada del Ave; talleres de Renfe, y con los suelos que ha dejado Adif qué pasa, por qué no se empieza el proceso de reversión; tercera fase es la variante de mercancías, que está en proceso. La cuarta fase es el soterramiento propiamente dicho, que ya hay ámbitos soterrados (Pinar de Antequera). Hubo liderazgo, que se ejerció y que por desgracia no se completó. Durante estos años, por una cuestión ideológica, se abandona».

Y en eso sí le dieron la razón. «Entiendo que se recupere el proyecto si se dice cómo se va a financiar», replicó María Sánchez. «El soterramiento no se va a hacer. Lo siento mucho. Era el sueño de muchos y lo convirtieron en pesadilla. La renegociación de la deuda la llevaré sobre mis hombros toda la vida, con llamadas de los bancos a las doce de la noche», señaló Puente. Que aportó un dato sobre el valor de los suelos. «Adif y Renfe pusieron los 400 millones y cuando se vendan los suelos, son los primeros que cobran. Y si hay sobrante, habrá para el resto de cosas que haya que hacer. Los suelos valen hoy 203 millones, es la oferta que ha tenido el Ayuntamiento por los suelos que iban a financiar la deuda».