La cifra de trabajadores en regulación de empleo en la región cae a la mitad en 2014

La cifra de trabajadores que ven cómo sus vínculos laborales con la empresa pasan por una regulación de empleo de carácter suspensivo, de reducción de jornada o de extinción de contratos se ha reducido a lo largo del recién concluido 2014 con relación a los volúmenes de expedientes de regulación de empleo (ERE) registrados un año antes, en 2013. A falta de la suma de las cifras correspondientes al mes de diciembre, el número de expedientes de regulación registrados en Castilla y León era de 1.046 frente a los 2.180 de un año atrás, si bien restan por añadir a la relación las cifras que aporte el mes diciembre, que en 2013 sumó otros 196 expedientes a la lista.

Así, la cifra de trabajadores afectados por un EREen la comunidad autónoma durante el pasado año ascendía a 11.805, frente al dato de 2013 que se elevaba hasta los 26.208 trabajadores, lo que significa una reducción equivalente al 54,96%, a la espera de lo que pueda rebajarse este porcentaje con los datos del último mes del año. Los expedientes de rescisión de empleo han caído a 47 hasta noviembre frente a los 131 de un año atrás, con una rebaja del 64,12%.

En cuanto a la cifra de afectados, 836 trabajadores vieron sus contratos rescindidos en comparación con los 2.581 del año anterior, con una rebaja del 67,61% a falta de la contabilidad de diciembre, «que será poco significativa», adelantó el director general de Trabajo de la Consejería de Economía y Empleo, Carlos Díez.

Convocatoria

La Junta, por su parte, ha publicado la convocatoria de las ayudas que a través de un primer programa buscan compensar la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores de empresas afectadas por expedientes de regulación de empleo de suspensión de contratos o reducción de la jornada por causas económicas, técnicas, organizativas y de producción, o derivadas de fuerza mayor, siempre que estos, en el periodo subvencionable, afecten a un máximo de 250 trabajadores, en cada centro que la empresa tenga en el ámbito de Castilla y León. Las cuantías que los empleados reciben adelantadas del desempleo se verán compensadas con una cantidad de 10 euros o 7 euros por jornada, con un máximo de 120 días, en función de su base de cotización.

El segundo programa tiene como finalidad la compensación económica de trabajadores con 55 o más años, que vean extinguido su contrato y minorado el importe de su indemnización cuando aquella deba abonarla al Fondo de Garantía Salarial (Fogasa), como consecuencia de la declaración de insolvencia de su empresa o si la extinción tiene lugar en un procedimiento concursal. «Se trata pues, de una ayuda de marcado carácter coyuntural, en una situación económica y de mercado de trabajo restrictiva que dificultará considerablemente la inserción laboral del citado colectivo de trabajadores», afirman desde la Consejería de Empleo en la convocatoria.

«A las ayudas del año pasado por los ERE hemos añadido en esta convocatoria, y como consecuencia de los acuerdos del Diálogo Social, algunas nuevas, como la que se concede por el agotamiento de las percepciones para quienes llevan dos años en regulación suspensiva o aquellos cuyos contratos decaen por casos de fuerza mayor», explicó Díez.

Nuevas modalidades

Las condiciones establecidas en los años anteriores se han modificado y en algún caso todavía construimos la forma en la que se va a conceder la ayuda, como consecuencia de los cambios que hemos observado en estos años y de los acuerdos que se han alcanzado en el marco de la Mesa del Diálogo Social de Castilla y León», puntualiza el director general de Trabajo y Riesgos Laborales, Carlos Díez, quien especifica así que en esta ocasión se han añadido algunas ayudas que hasta ahora no existían, como la dirigida a los mayores de 55 años afectados por una rescisión de contratos en casos de fuerza mayor, una modalidad que permite ahora cubrir los casos de empresas como Composites, Campofrío aunque en este caso va por otras líneas, o un hotel en Burgos, precisa el alto responsable de la Consejería de Economía.

En la convocatoria de este año se une además la ayuda dirigida a los trabajadores que llevan más de dos años en un expediente de regulación de empleo de carácter suspensivo y que, por tanto, han agotado la totalidad de la prestación por desempleo que les correspondía. «Hemos establecido una ayuda de 426 euros durante seis meses para estos casos», puntualiza Díez. Esta situación afecta, por ejemplo, a empleados de Antibióticos, en situación concursal desde hace muchos meses.

Más de 17.000 durante el año

La Junta tramitó y concedió el año pasado cerca de 17.000 solicitudes de ayudas y cubrió todas las peticiones, «porque lo que no se llega a cubrir en el año, se logra en cuanto se abren las del año siguiente», apunta el director general de Trabajo, quien matiza que en torno a un millar de peticiones que no se llegaron a tramitar en la convocatoria de 2014 se incorporan las primeras a la de 2015. «La idea es que nadie se quede fuera. De hecho, empezamos 2014 con un presupuesto de 6 millones de euros y hemos terminado con algo más de 9 millones. Para este año 2015, y con el fin de cubrir todas las líneas, también las nuevas para causas de fuerza mayor de carácter general y por agotamiento de prestaciones, se ha previsto una cifra de 10,5 millones de euros», comenta el director responsable del área de Trabajo del Ejecutivo regional, quien muestra su confianza en que la tendencia a la reducción del número de expedientes se mantenga y se confirme durante el año que comienza. De hecho, las ayudas que se calculan inicialmente para su tramitación en 2015 rondarían las diez mil para los expedientes de suspensión temporal de empleo y reducción de jornada, y en torno al millar para los casos de agotamiento de la prestación por desempleo. «La hipótesis es que este año será mejor», concluye Carlos Díez.