Los mutualistas tendrán que esperar cuatro años para recuperar todo lo que les debe Hacienda

Apuntan a que miles de mutualistas que en su momento pagaron impuestos de más por las aportaciones para su jubilación tendrán que esperar cuatro años para conseguir la devolución de Hacienda. Tras una sentencia del Supremo que avalaba esas devoluciones –que afectaban a los ejercicios comprendidos entre 2019 y 2022, al ser los que no habían prescrito– la Agencia Tributaria estableció una herramienta para que los afectados pudieran solicitarlas.

Pero Hacienda aprobó después un nuevo formulario que, entre otras cosas, implica que las devoluciones se realizarán de forma fraccionada, en vez de ser de golpe como hasta ahora. En el mejor de los casos, y confiando en la agilidad de la Administración, la recuperación total llegaría en 2029, tal y como explica el economista Rubén Gimeno.

Además, los mutualistas tendrán que solicitar esa devolución en la declaración de la renta de cada ejercicio. Es decir, en la Campaña de Renta de este 2025 solo podrán reclamar las devoluciones de 2019; en la de 2026 las de 2020 y en 2027 las del año siguiente y ya en 2028 las devoluciones de 2022.

«Quienes han iniciado un procedimiento administrativo solicitando la rectificación o devolución de las autoliquidaciones, la gran mayoría sí han obtenido las devoluciones y sorpresivamente, por el contrario, los que han optado por solicitar la devolución, a través del formulario de la AEAT, no se les ha devuelto prácticamente a ninguno», advierten los economistas.

«No es sencillo explicarles que la discriminación entre los que sí han obtenido las devoluciones y los que no ha dependido solo de la opción elegida para solicitarla», añaden los economistas que, en todo caso, aluden al malestar de la Agencia Tributaria al haberse generado esta situación a raíz del cambio que el Ministerio impulsó durante la tramitación parlamentaria de la reforma fiscal.

Desde la Asociación Española de Asesores Fiscales (AEDAF) indican que el Ministerio de Hacienda ha justificado el cambio en que «la calendarización de las devoluciones ofrece certidumbre sobre la imputación en la contabilidad nacional de las devoluciones e implica establecer un proceso más reglado y ordenado«. Sin embargo, los expertos consideran que este razonamiento «en ningún caso justifica la decisión adoptada, ya que lo que realmente está provocando es retrasar injustificadamente la devolución de cantidades que los tribunales han reconocido como legítimamente exigibles por parte de los afectados».

En un comunicado muy crítico con el ministerio dirigido por María Jesús Montero, advierten que «este retraso no hace sino aumentar el descrédito de una Administración tributaria que debería velar por la protección de los derechos de los contribuyentes y no complicar su ejercicio».