La reutilización, la segunda vida de los productos fabricados y el uso de materias primas recicladas tiene que ser en los próximos años el modelo hacia el que se dirija la economía de Castilla y León para evitar el consumo lineal de materias vírgenes ... y facilitar así la lucha contra el cambio climático en el que se ha comprometido el Gobierno de la comunidad autónoma a través del decálogo aprobado a comienzos del mes de junio para que impregne con su filosofía toda la normativa regional según ha explicado el consejero Fomento y Medio Ambiente de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, durante su intervención en el Foro Económico de El Norte de Castilla en Salamanca que ha tenido lugar a través de la plataforma de la web elnortedecastilla.es. Este foro económico cuenta con el patrocinio de grupo CGB Nuevas Tecnologías, Enusa y Laboral Kutxa.
«Con un 51% de superficie forestal, esta comunidad es un verdadero sumidero natural de CO2 en la lucha contra el cambio climático»
Suárez-Quiñones ha resaltado la trascendencia que tuvo la conferencia sobre cambio climático que se desarrolló en España a finales del año pasado en las dos finalidades de este tipo de eventos; el logro de acuerdos y el aumento de la conciencia social sobre este problema. En el caso de los acuerdos globales, ha admitido «que el resultado fue discreto por la poca implicación de los países más ricos e industrializados». Sin embargo, sí ha considerado trascendente el incremento observado en la concienciación social sobre la gravedad del cambio climático. «En Castilla y León somos ambiciosos en materia de lucha contra el cambio climático. Por la propia conformación de la comunidad autónoma, con un 51% de superficie forestal, lo que nos convierte en un auténtico sumidero natural de CO2» ha manifestado el consejero al inicio de su intervención.
Un decálogo regional
Juan Carlos Suárez-Quiñones ha centrado su exposición en la explicación del decálogo de medidas frente al cambio climático aprobado el 4 de junio último por el Gobierno autonómico si bien ha puntualizado que en Castilla y León se aplican desde hace tiempo iniciativas en este sentido, como en el caso de la estrategia de la calidad del aire, donde más allá del cumplimiento de los umbrales de emisiones contaminantes exigidos por la Unión Europea la región se ha comprometido a «no superar los niveles señalados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), valores que son obligatorios en Castilla y León», ha precisado. De igual manera, ha recordado que el 18 de junio el Gobierno que preside Alfonso Fernández Mañueco ha puesto en marcha el decreto de simplificación para el fomento de la actividad económica que facilita, entre otras cosas, los proyectos de producción de energías alternativas y sostenibles como la eólica o la fotovoltaica.
«En Castilla y León la calidad del aire es excelente, solo hay problemas en algunas zonas con el ozono»
El consejero ha iniciado así su repaso al decálogo con la primera de sus iniciativas, la puesta en marcha de la Ley de Cambio Climático, que exige para Castilla y León una transición energética hacia un nuevo modelo basado en las energías sostenibles y ha hablado de la importancia de la estrategia regional de la energía térmica basada en el uso de la biomasa procedente de la limpieza silvícola. Una iniciativa que con una inversión de 36 millones de euros ha puesto en marcha 22 instalaciones individuales y 12 redes de calor. «Pretendemos la extensión de las redes de calor al millar de edificios públicos de la Junta en la región y la subasta del calor sobrante para comunidades de vecinos» ha indicado. «Es un modelo con mucha tradición en los países del norte de Europa» ha agregado.
Una potencia en energías renovables
En segundo lugar hizo referencia a las energías renovables para destacar la potencia regional como exportador de esta producción, dado que Castilla y León genera el 22% de la energía de fuentes renovables en España, sobre todo eólica y fotovoltaica. Y el tercer punto es continuar la política de mejora de la eficiencia energética y reducción del consumo de combustibles fósiles. De esta forma, el cuarto punto del decálogo propone el uso por los organismos regionales de vehículos preferentemente dotados de motores híbridos o eléctricos puros donde las condiciones de utilización lo permitan y aconsejen.
En quinto lugar el Ejecutivo regional promoverá áreas urbanas de bajas emisiones contaminantes y relacionado con lo anterior, en sexto lugar se propone la mejora de la calidad del aire, si bien en Castilla y León «la calidad del aire es excelente, solo han problemas de concentración de ozono en algunas zonas», ha dicho el responsable de Medio Ambiente. El Ejecutivo prevé aprobar también un proyecto de economía circular para optimizar los recursos «y dar una segunda vida a las materias primas . «La refabricación es una oportunidad de futuro» ha asegurado.
Por último, el decálogo señala un plan de acción forestal, reforzar la gestión de residuos y el refuerzo de las competencias contra el cambio climático.
Polémica por las macrogranjas
El consejero de Fomento y Medio Ambiente ha destinado la última parte de su intervención a responder a las numerosas preguntas que formularon las personas que han seguido en directo la transmisión del Foro Económico de El Norte de Castilla en Salamanca a través de la plataforma web elnortedecastilla.es y ha contestado a varias de ellas relacionadas con la instalación de 'macrogranjas' en la región. Juan Carlos Suárez-Quiñones ha matizado que la actividad ganadera está «perfectamente regulada» en la normativa de la comunidad autónoma y señaló que, dadas las características del mundo rural «es probable que allí no se instale una industra aeronáutica, pero sí industrias relacionadas con la agroalimentación» para la que la normativa establece unas exigencias cuyo cumplimiento vigila la Administración regional. También se ha mostrado favorable al crecimiento de la industria automovilística regional con el cambio hacia tecnologías eléctricas.
Campaña contra incendios forestales
«Este ha sido un año en el que las personas, durante algún tiempo hemos permanecido en casa y el campo apenas se ha pisado. El cardo ha podido crecer con más facilidad y ahora, todo ese incremento de masa vegetal se agosta con la llegada del verano y se puede convertir en un peligroso combustible para los incendios forestales» ha recordado el responsable del sistema de lucha contra el fuego en los bosques.
«Por este motivo, este año hemos pedido a los dueños de las fincas que procedan a su limpieza, porque pueden ser un foco de incendios» ha añadido Suárez-Quiñones, quien ha puntualizado sin embargo que la mayor parte de los fuegos «son provocados. Son muy escasos los que tienen un origen espontáneo ajeno al ser humano», ha señalado durante su charla, en la que también ha señalado que la nueva normativa exigirá que en los concursos públicos se valore el uso por las empresas de áridos reciclados procedentes de demoliciones y de construcción.
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