Sabadell abre la puerta a prejubilar a otros 500 empleados

Aunque según los sindicatos el objetivo de este proceso es sumar otros 500 empleados a la lista de prejubilados, Banco Sabadell indica que no hay una meta concreta e insiste en que la medida estaría en línea con la estrategia que se ha seguido en los últimos tres años, en los que se han llevado a cabo unas 600 prejubilaciones negociando con determinados perfiles de empleados.

La apreciación resulta clave teniendo en cuenta que el próximo 28 de mayo la entidad presentará su nuevo plan estratégico que, bajo la batuta del nuevo consejero delegado, César González-Bueno, pretende poner el foco en la digitalización para seguir actuando en la reducción de costes, lo que podría conllevar el cierre de un mayor número de sucursales y, por tanto, también un nuevo recorte en el número de trabajadores. Y todo en un momento en el que los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) se han convertido en el pan de cada día en el sector, frente a las salidas voluntarias por las que ha apostado Sabadell en los últimos tiempos. Pese a ello, este modelo, al igual que en el resto del sector, no encaja del todo con los planes del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, que aboga por rediseñar los coeficientes reductores por jubilación anticipada para, precisamente, evitar los costes que implican esa retirada temprana del mercado laboral.

González-Bueno ya dejó claro en la última presentación de cuentas del banco que el sector financiero aún tiene espacio para reducir costes, aunque habrá que esperar para saber si los mismos seguirán llegando desde las plantillas o se centrarán en el proceso de digitalización. Según su último informe trimestral, la entidad cerró marzo con 15.019 empleados (excluyendo su filial británica TSB), 2.120 menos que el mismo mes de 2020. El número de oficinas aún ronda las 1.698, desde las 1.862 de hace un año.

Además de la reducción de costes, la venta de carteras o de algunos negocios puede ser la otra pata para que la entidad mejore en eficiencia y, en este sentido, González-Bueno empieza a perfilar su estrategia. Lejos de que la primera venta sea la de su negocio en Reino Unido como anticipaban hace meses los expertos, la entidad ha anunciado este jueves que ha iniciado conversaciones para vender su filial andorrana tras recibir una oferta por parte de MoraBanc, una de las entidades de banca privada más importantes del Principado.

Ambas entidades han informado ya a los distintos supervisores y, caso de materializarse, está previsto que la operación incluya el derecho de los accionistas minoritarios a adherirse a ella, en los mismos términos que se acuerden con Banco Sabadell.

«Estas conversaciones se enmarcan en nuestra estrategia de centrar nuestra actividad de negocio en España y considerar aquellas operaciones corporativas internacionales que tengan sentido tanto por la naturaleza del comprador, como por las condiciones económicas planteadas», indica González-Bueno en un comunicado.

La actividad bancaria de Banco Sabadell en el Principado se vehicula a través de BancSabadell d'Andorra, que controla con cerca del 51% de su capital, y que comparte con MoraBanc un perfil de banco sólido, alta solvencia y un fuerte arraigo en el tejido socioeconómico andorrano, con un elevado crecimiento continuado de los beneficios en los últimos años.

BancSabadell d'Andorra gestiona actualmente unos recursos totales (de balance y fuera de balance) de 1.830 millones de euros y su volumen de créditos asciende a 426 millones de euros. Cuenta con un ratio de solvencia CET1 del 20,4% y un ROE del 10,5%. Su cuota de mercado es cercana al 20%, cuenta con siete oficinas y una amplia red de cajeros automáticos que atienden al 23% de los particulares y el 32% de las empresas andorranas.