Luis Alonso, durante la preparación que ha llevado a cabo en Fuerteventura. El Norte

Un reto entre dunas y arena

El atleta granjeño Luis Alonso Marcos participa en los 100 kilómetros del Sahara

Domingo, 6 de octubre 2019

Luis Alonso Marcos llevaba ya tiempo sin competir, precisamente desde finales del mes de abril en la Rioja Ultra Trail. Era una carrera también de tres etapas y un formato similar al que ahora tiene en mente pero por montaña, no por el desierto. La rodilla le dijo que hasta ahí había llegado. Pero su pasión por la aventura (y también la perseverancia de los organizadores), por nuevos retos corren (y vaya si corren) por sus venas. Por eso decidió confirmar su presencia en esta nueva edición de los 100 kilómetros del Sahara, en Túnez. Es una prueba que se desarrolla durante tres días en etapas de 15, 35 y 50 kilómetros durante los días 9, 10 y 11 de este mes.

Publicidad

Un tratamiento para llegar en las mejores condiciones

Hace ya unos años que a Luis Alonso le diagnosticaron que no tenía el ligamento cruzado en su rodilla derecha y para fortalecer esa zona y llegan en mejores condiciones a esta prueba ha realizado un trabajo en la clínica Delta Terapias. «Lo que hemos intentado es no solo hacer un trabajo de rodilla específico;también que el resto de la musculatura que le acompaña, tanto desde la cadera como desde el tobillo funcionen lo mejor que se pueda y que así las fuerzas que se producen cuando corres se distribuyan entre las diferentes partes de la pierna y así poder hacer que la rodilla trabaje menos», apuntó Daniel Bueno.

Correr por la arena posiblemente no sea lo mejor, «porque hay que estar extremadamente fuerte». Y en este caso, la recuperación ha consistido en un trabajo de neuromodulación funcional para conseguir que las partes que están más sanas «trabajen a tope, y luego, la utilización de tecnología avanzada a nivel de fisioterapia para conseguir que en la rodilla, cartílagos y zonas afectadas funcionen lo mejor que se pueda y no se resientan durante el ejercicio físico. Contamos con su ejercitación muscular, muy importante».

Daniel Bueno resaltó el carácter del atleta granjeño. «Es una persona muy disciplinada y da siempre todo lo que tiene así que contamos en su recuperación con su fortaleza física y mental; se lo toma todo muy en serio».

Lo primero que a uno se le viene a la cabeza es sol, calor (temperaturas que van desde los 30 a los 40 grados) durante el día y las que oscilan entre los seis y los diez grados durante la noche, con alguna posibilidad de alguna tormenta de arena. Luis Alonso está con ganas, con mucha ilusión;sabe que no se ha podido preparar todo lo bien que hubiera gustado, «pero aún así daremos el cien por cien como siempre u trataremos de competir al máximo y disfrutar», comentó el atleta granjeño.

¿Cómo se prepara una prueba de estas características? «Es una carrera de ultradistancia con la peculiaridad de que el terreno es muy arenoso;los entrenamientos son como para una carrera de larga distancia y si se puede, haces algo de trabajo en tierra». Por eso ha estado durante una semana en la isla de Fuerteventura, concretamente en el Parque Natural Dunas de Corralejo. «Durante esa semana he estado intentando aclimatarme a esas condiciones y terreno. Han sido 150 kilómetros con diferentes entrenamientos y viendo material (calcetines, polainas especiales), el ataque a las dunas por diferentes sitios para saber leer luego por donde está más dura la tierra y así no hundirse en ella», comentó el atleta.

«La preparación ha ido bien, pero voy algo corto de kilómetros y es una incógnita saber cómo se comportará la rodilla en la última etapa. En Fuerteventura me he encontrado bien; he realizado entrenamientos simulando lo que será la carrera y el día de la tirada larga final, aunque no me ha dicho todavía basta sí que notaba la fatiga muscular, pero las sensaciones son muy buenas y viendo que todo el trabajo realizado en este mes de septiembre se ha asimilado muy bien», explicó.

Llevaba desde 2012 sin correr en este tipo de terreno (dunas) «y ha sido una experiencia positiva; he podido aprender, recordar cosas importantes, sobre todo, cómo afrontar las mismas y testar diferentes tipos de calcetines y zapatillas, para así llevar el material adecuado».

Publicidad

Su intención es la de disfrutar al máximo «y volver a sentir la competición por las venas en un desafío extremo;por eso me embarqué en los 100 kilómetros del Sahara. Es una carrera que tiene aventura, terreno duro, condiciones extremas... Vamos, lo que a mí me gusta».

Viajar y correr son dos de sus pasiones «y con este tipo de carreras al final conoces muchos lugares y disfrutas de la pasión por correr. Es otra forma también de hacer turismo y a la vez saciar tu afán competitivo y tu pasión por las carreras extremas», Ya sabe lo que es correr por el desierto, dentro del Grand Slam Marathon, el maratón del Sahara en Tindug, Argelia. «La experiencia fue muy positiva, es el maratón más llano; había dunas y me apasionó tanto que dije que volvería al desierto y ahora me ha llegado el momento», dijo Luis Alonso.

Publicidad

Sabe también que por la edad y por sus problemas en la rodilla, «no puedo entrenar y competir como me gustaría, estoy posiblemente ante una de mis últimas aventuras de este tipo. Llevamos ya muchos kilómetros en el cuerpo, tenemos una lesión que a otras personas les impediría correr y los años no pasan en balde, así que intentaremos disfrutar de esta aventura como si se tratara de la última».

Es lo que pretende, disfrutar, pero con los pies en el suelo, a otro nivel, no ya tan competitivo y seguramente en carreras de menor distancia, «pues hay una serie de circunstancias, sobre todo la rodilla, que no me van a permitir competir como lo veníamos haciendo, así que vamos a vivir esto con la mayor intensidad e ilusión posible y viendo como nos responde el cuerpo. Ya veremos si nos podemos meter en más aventuras o seleccionar un par de carreras o tres al año», añadió.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad