El burundés Ndikumwenayo gana el cross de Cantimpalos y Javi Guerra termina en cuarto lugar

Thierry Ndikumwenayo cumplió el pronóstico y se llevó con mano firme la 48 edición del Cross de Cantimpalos. El atleta de Burundi continuó su excelente temporada otoñal -segundo en Soria, quinto en Atapuerca y gaandor en Aranda de Duero y Alcobendas- completando los diez kilómetros de la prueba segoviana en un tiempo de 30 minutos y 22 segundos. Segundo fue el español Albert Chemutai y tercero el eritreo Awet Habte. Javi Guerra, que se tomó el evento como un examen de su puesta a punto en el último mes, acabó muy satisfecho con su cuarto puesto, con 31 minutos y 13 segundos.

El burundés, atleta del Playas de Castellón afincado desde hace tres años en Alicante, reconoció con su escaso español que la carrera había sido plácida. «Muy fácil para mí, para otros no lo sé», dijo con una sonrisa de oreja a oreja. Ndikumwenayo rompió la prueba a partir de la tercera de las cinco vueltas del circuito, en las afueras de Cantimpalos. Hasta entonces, un ramillete de atletas compartía la cabeza.

Guerra planteó el cross como una puesta a punto un mes después de volver a la competición, en Atapuerca, tras la lesión que le impidió correr la maratón de los Mundiales de Doha. «Quería correr lo más fuerte posible». Por eso encabezó la prueba en la segunda vuelta en pos de marcar un ritmo constante. «He dado un salto de calidad respecto a Soria. Estoy muy contento, las cosas van bien de cara al mes de febrero». Disputará entonces la maratón del campeonato de España en Sevilla, la cita clave para lograr una plaza en los Juegos Olímpicos.

La victoria en la prueba era «practicamente imposible» para Guerra. «Son dos de los diez mejores del mundo en cross. El nivel es grandísimo. Aun así he estado peleando de tú a tú con ellos». El segoviano aguantó la estela del atleta eritreo hasta el kilómetro final.

Elena García Grimau, que se impuso en el cross de Alcalá de Henares, ganó la prueba femenina, de 7.500 metros, con un tiempo de 26 minutos y 35 segundos, por delante de la ecuatoriana Katherine Tisaleman, que llegó a 11 segundos, y Beatriz Álvarez. Por su parte, la segoviana Águeda Muñoz, que completó su preparación en pista con una dura mañana de Cross, terminó quinta con un tiempo de 27 minutos y 8 segundos.

García Grimau salió en el grupo delantero y apretó la marcha a mitad de carrera. «En el último kilómetro iba ya bastante fatigada, pero no se me podía escapar el título. Estoy muy contenta». El tramo final fue complejo, especialmente por la incidencia del viento en la recta trasera. «Estamos acostumbrados a correr con todas las inclemencias». Una habitual de otras ediciones, salvo coincidencia con el Europeo, se siente como en casa. «Llevo corriendo un montón de años. Siempre que puedo, me apunto».