Cuando la alumna pasa a la maestra

Lo hizo además recientemente la semana pasada en el XXX Trofeo Internacional que lleva el nombre de Ana Pérez, la mejor atleta de pruebas combinadas que ha dado Valladolid y en su misma presencia. Un salto de 1,78 que ponía patas arriba el mejor registro vallisoletano de todos los tiempos, el de la atleta Josefa López, que con 1,77 ostentaba este récord. Además, lograba superar la marca de la propia Ana, que con 1,74 estaba también en ese podio de elegidas, amén de ser su entrenadora y formadora en el CAV Club Atletismo Valladolid desde que Laura era una chiquilla a la que insistía en la clave del éxito: trabajo y trabajo. Compromiso, disciplina y constancia. No hay otra.

Laura Martín (Laguna de Duero, 20 de julio de 2000) practicaba atletismo en el colegio con Mario, su profesor de Educación Física. Cuando se trataba de saltar altura, al final era ella la que quedaba junto a un par de chicos disputando por quién volaba más alto. Así se apuntó a la escuela de atletismo municipal donde en una competición provincial conoció más este deporte y a muchas de las que ahora son sus amigas y que le condujeron hacia el Club Atletismo Valladolid. «Yo era muy niña y no me centraba. Con Ana Pérez lo aprendí todo. La disciplina, haces un deporte, pero lo más importante es entrenar, entrenar, día a día… Y si llueve te da igual, y si es tu cumpleaños, entrenas también. La verdad es que eso no me molestaba», dice Laura.

Desde todas las modalidades atléticas se fue especializando en el salto de altura y allí fue recopilando buenos resultados en categorías inferiores hasta que el 30 de mayo de 2015 en Río Esgueva (Valladolid) lograba la medalla de oro en el Campeonato de España cadete. Sin embargo, sus dos hitos más importantes han sido el Campeonato de España sub 20 en donde saltó por encima de 1,72 y el subcampeonato nacional sub 23 Promesas, categoría en la que actualmente compite, con una marca de 1,74.

El tránsito natural fue entrar en el Centro de Alto Rendimiento de La Blume en Madrid donde está actualmente a las órdenes de Daniel Martí, si bien, el año pasado con el parón de la pandemia permaneció en casa. «Me vine a ver a mis padres y esa semana nos confinaron. Lo primero que pensamos fue ¿cómo vamos a entrenar? Sin embargo, todas las tardes nos conectábamos por zoom y en la terraza hacíamos algo: ejercicios de fuerza, con cubos de fregonas y un palo. Inventamos. A mí me vino bien la pandemia, me gustó estar encerrada…».

Laura, conocida en el pueblo por la hija de Julio Martín, comenzó a estudiar Psicología hace un par de años y esto también le ha venido bien para su desempeño deportivo. «Notaba que en muchos aspectos no me concentraba. Iba un poco a lo loco, Además, siempre he tenido mis manías. Lo pensaba demasiado, me obsesionaba. Decía, eso está muy alto, eso no lo salto y ponía una barrera en mi cabeza. Ahora lo visualizo, pienso que lo puedo hacer antes de saltar y lo hablo con mi entrenador».

Precisamente para su entrenador actual, Laura puede estar muy cerca de superar los 1,83 (mínima para ir al Campeonato de Europa) dentro de poco tiempo, aunque a ella no le gusta pensar en eso. «En el atletismo pueden pasar un montón de cosas, irte fatal o sensacional como a mí este año. Estaba para mejorar marca, pero no tanto…», señala.

El flamante vuelo sobre 1,78 de la atleta del CAV de la semana pasada al aire libre en Río Esgueva fue tras superar 1,71 que le daba la victoria y 1,76, que es la mínima para poder ir al Campeonato de España absoluto de altura. Así, sus dos próximos retos son precisamente el Campeonato de España Promesas en Nerja, Málaga, y el Absoluto, en Getafe del próximo año. «En el sub 23 espero medalla, no sé de qué color, y me espero de rival a la atleta de pruebas combinadas Claudia Conte. En el absoluto, con esta marca, si estoy como ahora, siendo como será muy difícil, puedo estar arriba, aunque depende de muchos factores…».

La marca ha insuflado una corriente de energía positiva en Laura, que confiesa fijarse en muchas atletas saltadoras y especialmente ahora en Ruth Beitia y en la croata dos veces campeona del mundo Blanka Vlasic. Aunque es muy joven, a lo lejos, ya no tanto, se ve el récord de Castilla y León de la toresana Raquel Álvarez Polo, que con 190 centímetros sobre la pista cubierta fue subcampeona de España en 2016 en Madrid. Mientras, disfruta de su deporte, que es la vez su gran pasión. No hay para más. «Ahora solo hago deporte y estudio, si tengo algo de tiempo, no mucho, estoy con mis amigos y con mi familia».

¿Y los JJOO? «Si soy sincera antes del pasado fin de semana, ni de broma, pero después sí que me lo creo. Nunca se sabe, no me pongo límites. Si sigo en esta línea, me encantaría…», finaliza.

1,78. Un salto que da confianza para superar también a tu maestra.

• Temas
• Club Atletismo Valladolid