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Pasear por la localidad de Palazuelos de Eresma en estos días es curioso porque hay un par de detalles que rompen la normalidad habitual del pueblo. Por un lado, en el Ayuntamiento se ha construido un mural con banderas del mundo, los aros olímpicos y una buena colección de retratos alrededor de un cartel con el lema: «Palazuelos con David Llorente». En la misma línea se ha decorado la entrada al colegio. Todos esos elementos llevan la marca de las manos infantiles que los han diseñado, que no son otras que las pequeñas manos y mentes imaginativas de los niños y niñas que están en estos días de verano formando parte del programa 'Conciliamos' de la Junta de Castilla y León. Un programa que ayuda a los padres a poder dejar a sus hijos a buen recaudo, aprendiendo y disfrutando, durante las mañanas de verano mientras ellos trabajan. Un proyecto que se mueve entre el campamento de verano, pues los pequeños corretean y se divierten jugando, y las aulas de la escuela, porque al final siempre terminan aprendiendo cosas nuevas. De hecho, este año, más.
Porque estos días, cuando la cita olímpica se va acercando, todos ellos están aprendiendo quién es David Llorente, qué deporte hace y porqué va a los Juegos representando a España cuando hace muy poco tiempo estaba como ellos, correteando por el mismo colegio. «Me daba un poco de rabia que muchos chavalillos no supieran exactamente quién es David Llorente», comenta Henar Gómez, monitora del programa y concejala en el Ayuntamiento; «que nadie les hubiese dicho que tenían en el pueblo una figura tan importante como la de un chaval de, de la nada, ha llegado a los Juegos Olímpicos. De salir de aquí del río, donde están ellos todos los días bañándose, a llegar a eso». Así que se pusieron manos a la obra con recortes de periódicos, con fotos de Llorente, con sus propias redes sociales. Y a través de actividades sencillas como el dibujo, animarles a expresar lo que cada uno había asimilado. El resultado empapela el pueblo. También les han intentado enseñar el deporte que practica David, «lo poquito que sabemos nosotros».
El cincuenta por ciento no sabía quién era David Llorente. «El decirles que había venido a su mismo colegio, con sus mismos profesores, pues les ha emocionado. Les ha gustado mucho y decidimos hacer esos murales y, ya que estaba en el Ayuntamiento, les propuse ponerlo también en la plaza, que es donde van todos los niños, para que todos lo vieran. Que preguntasen a sus padres quién es o porqué está esto aquí». Como tuvo aceptación, pues han estado durante dos semanas estudiando esta nueva asignatura.
No solo a los hijos les hacía falta saber quién es David Llorente, sino también a muchos de los padres. «Los que son de aquí de toda la vida o los que tienen hijos más mayores, algo», comenta Henar. Pero las familias que llevan menos años instalados en el pueblo, no lo tenían tan claro. Y, si alguien sí conocía su figura, no sabía que había nacido en Palazuelos y empezado su andadura en la localidad. «Es más», continúa Henar, «una madre decía que habían estado hablando con unos amigos y no sabía que era de Palazuelos. No asimilaban a David con Palazuelos de Eresma».
La influencia positiva que la figura de David puede tener en los niños es indudable. Se le puede tomar como ejemplo con un nivel de identificación enorme. «Ahora mismo que tenemos algunos grupos de chavales haciendo vandalismo y portándose un poco mal y estas cosas, ver que un chaval de aquí está cumpliendo sus sueños y llegando hasta allí, les tendría que influir mucho. Pero lo que falta es darles a conocer a los chavales del pueblo siendo igual que ellos, empezando igual que ellos».
También a la familia de David le ha gustado la iniciativa. De hecho, al conocerla, su padre se marchó a casa y volvió al colegio con una imagen de gran tamaño en cartón de su hijo vestido con los colores de España. Los niños del programa enseguida comenzaron a trabajarla a su manera y le colgaron una medalla. De oro, por supuesto. De repente, el río Eresma ha entrado en sus vidas de una forma que seguramente no esperaban y, de sus aguas, puede haber surgido su nuevo héroe, su nuevo referente. Pocas veces se puede ver de una manera tan gráfica el beneficio educativo y de trasvase de valores que puede tener una figura del mundo del deporte en los más jóvenes. Sobre todo una figura como la de David, siempre con una sonrisa, siempre contando nuevas historias a través de sus redes y siempre mirando con positividad hacia el futuro.
Estos Juegos Olímpicos van a ser diferentes, quizá los más extraños de toda la historia, pero para la localidad de Palazuelos y para David Llorente van a ser únicos y el impacto que puedan tener habrá que analizarlo con el tiempo.
El Ayuntamiento de Palazuelos de Eresma, al ver la acogida de esta primera iniciativa, está estudiando alguna más de cara al día en que David compita, que será el próximo miércoles 28 de julio a una hora muy temprana, pues las calificaciones están previstas a las 6:50 de la mañana y a las 9:00. Luego, las semifinales se disputarían el siguiente viernes, 30 de julio. Igual que la final, en la que se espera que entre el segoviano, que será el mismo viernes a las 9:00.
Igual que estos dibujos que han salido a las calles del pueblo están contribuyendo a que jóvenes y no tan jóvenes sepan quién es David; le están llegando al joven piragüista. Él, desde Tokio, entrenando ya duramente en el canal olímpico para tener las mejores sensaciones, no está teniendo demasiado tiempo para verlo todo, pero sí le ha emocionado lo que ha visto. Para él también está siendo una inyección importante de ánimo y moral ver lo que está movilizando su figura en su casa, en la localidad donde reside su familia.
David Llorente puede presumir de que, al menos durante un verano, su nombre se ha convertido en asignatura en el colegio de su tierra. Quién sabe si no en un referente que dé lugar a que muchos sigan su ejemplo.
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Mikel Labastida y Leticia Aróstegui (diseño)
Óscar Beltrán de Otálora y Gonzalo de las Heras
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