El Unami vuelve a pagar caro sus desconexiones y cae con contundencia

El encuentro comenzó de la peor manera para el equipo segoviano. Una entrada por la banda izquierda de Álex Matos resultó letal. Su centro por abajo lo remató con comodidad Miguel Ángel para hacer el primer tanto de la tarde ante la mirada impasible de la defensa del Unami. El tempranero gol podía provocar que el partido se volviera más eléctrico, pero nada más lejos de la realidad. El conjunto segoviano no terminó de despertar y el choque se convirtió en pelotazo tras pelotazo. El mal estado del terreno de juego fue clave para ver este tipo de encuentro y el propio campo estuvo a punto de jugarle una mala pasada a Kengo. En un balón largo, el bote llegó a sobrepasarle, pero con la fortuna de que Visa no pudo aprovechar la situación para marcar a puerta vacía.

Hasta pasado el ecuador de la primera mitad no llegó la primera oportunidad para el Unami. Fue en un balón filtrado de Domingo a la espalda de la defensa para la llegada de Contreras, quien realizó un centro raso, aunque finalmente fue interceptado por el portero de La Vírgen cuando Alcu tenía todo a favor para empujar el balón a la red. A partir de esta jugada, el equipo segoviano empezó a tener varias llegadas con centros laterales que no encontraron rematador. En los minutos finales del primer tiempo llegó un nuevo contratiempo para los pupilos de Gonzalo del Valle, la lesión muscular de Cámara en el centro de la defensa. Sergio Prieto tuvo que entrar en su lugar. El primer acto acabó con un saque de banda a favor del Unami que finalizó con un tímido disparo de Jorge dentro del área a las manos del portero.

En la segunda parte, la escuadra segoviana salió con más intensidad al campo en busca del empate. En los minutos iniciales un centro desde el costado derecho lo remató Alcu a las manos del portero. Sin embargo, tan solo unos minutos después, La Vírgen dispuso de una clara ocasión para aumentar su ventaja. Un córner perfectamente botado al punto de penalti por Álex Matos fue rematado de volea por Del Castillo por encima del larguero cuando estaba totalmente solo.

El susto provocó que al conjunto azulón le volvieran a entrar las dudas de envites pasados, perdieran el control del partido y esa intensidad inicial. Los cambios revitalizaron al conjunto leonés y en el minuto 67 tuvieron su premio. Jorge, que entró al descanso, dejó sentado con un recorte a Contreras y sirvió un balón maravilloso a Del Castillo que no perdonó para establecer el 2-0. Solo un par de minutos después, un balón filtrado de Basalo a la espalda de la defensa del Unami dejó solo a Abel Calleja, encargado de batir por bajo a Kengo y dictar sentencia en el encuentro. Tal fue la desconexión del Unami que, una vez más, volvía a vivir esos minutos fatídicos con los que decía adiós a las opciones de sacar algo positivo.

Con el 3-0 en el marcador, los hombres de Gonzalo del Valle se encontraron a merced de un rival crecido. Chema tuvo en sus botas el cuarto tanto en un mano a mano que solventó bien Kengo. El equipo segoviano afrontó los últimos minutos mirando la hora y deseando el final de otro encuentro para olvidar. En la última jugada, Espe falló un gol a puerta vacía que definió a la perfección cómo se encuentra el ánimo y el acierto del equipo. Desesperado, sin suerte, sin gol y con muchas dudas. Un bagaje complicado y que pesa como una losa.