El Laguna remonta en inferioridad y con Emi como portero improvisado

El derbi comenzó sin un dominador claro. El Laguna solo se encontraba cómodo cuando Álex Rabadán tenía el balón en sus pies. El '10' movía el juego a su antojo, pero arriba, los hombres de Carlos Álvarez no tenían las ideas claras. En el otro lado, Pavel generaba casi todo el peligro, con constantes arrancadas y pases a sus compañeros. Sin embargo, fue Prieto quien tuvo la primera gran ocasión con un disparo lejano tras una gran jugada con Guerra.

Los anfitriones empezaban a animarse y la sensación de que el gol estaba cerca se palpaba. Más si cabe tras un córner en el que Álex Martín disparó al palo. El árbitro permitía jugar, al menos hasta ese momento.

Pero todo cambió en una jugada. El colegiado señaló penalti a favor de La Cistérniga después de que Oliver derribara a Rodri en el área. El contacto parecía claro, pero el color de la tarjeta asombró a los presentes. No había más guardametas en el banco. Al menos eso parecía. Porque la expulsión dio paso al show de Emi, que pasó de mediapunta a portero. Con el penalti no pudo, Fer no perdonó y puso el 1-0 en el marcador.

Sin embargo, nadie podía imaginar que esta acción cambiaría el partido a favor del Laguna. Los visitantes poco tardaron en reaccionar, de ello se encargó Isma Casado. Una gran arrancada desde la banda acabó con un fuerte disparo lejano que entró por toda la escuadra, Tapias se estiró, pero poco pudo hacer para salvar el empate. No obstante, la ovación de la grada se la llevó Emi. Cada vez que tenía el balón el improvisado guardameta se inventaba algo con los pies, hasta el punto de llegar a hacer una 'ruleta' para salir de una presión fuera del área.

El guion de la segunda parte apenas varió. La Cistérniga intentaba llegar a puerta, pero sin ni siquiera disparar entre los tres palos, desaprovechando la gran ventaja que tenía. Mientras tanto, Isma Casado seguía a lo suyo; una gran jugada suya con Rabadán dejó solo a Colino que marcó a placer. Pasividad de los locales, que vieron cómo se le escapaba un partido que dieron por ganado cuando no tocaba.

La reacción de los hombres de Roberto García llegó con la entrada al campo de Mario Alonso. Él y Pavel consiguieron calmar el juego y adueñarse del duelo, aunque Emi seguía sin necesidad de recurrir a sus manoplas. Prieto fue el único capaz de encarar y de proponer algo en ataque de una débil delantera que echó demasiado de menos la baja de Faura.

No fue hasta los últimos minutos cuando se vio a Emi actuar realmente como portero. Dos disparos de Prieto pusieron el miedo en el cuerpo a los visitantes, pero el meta lagunero repelió el peligro de nuevo. No hubo tiempo para más, y aunque lo hubiera habido, La Cistérniga seguiría sin ser capaz ni siquiera de empatar. La derrota no solo duele por la forma, sino porque se escapa una opción clamorosa de haber sellado una salvación que se complica de cara a las últimas cuatro jornadas.

El Villa de Simancas hizo saltar la banca. Llegó a Mojados con la intención de meter picante al play-off y lo consiguió. Se llevó el triunfo que supuso la primera derrota del conjunto amarillo en casa esta temporada. La racha no es buena para los hombres de Adri Fraile, que siguen en zona de promoción, pero sin el colchón tan imponente que se habían fabricado.

A la media hora Unai adelantó al cuadro que adiestra Pablo Gil. Se marchó en velocidad y definió como mejor sabe. La segunda parte supuso un intercambio de golpes, que terminó con un gol anulado a los locales y la expulsión de Salamanca cuando el partido agonizaba. El Villa de Simancas se coloca a cuatro puntos del play-off.

Se truncó el buen momento del Betis con una derrota contra uno de los equipos cedió a domicilio. El Béjar los ganó en intensidad y gracias al balón parado se adelantó en el marcador. Al iniciar la segunda parte, de córner, Íñigo mató las opciones de los verdiblancos con el segundo y definitivo.