La Cistérniga rompe sus maleficios

A los quince minutos se terminó la igualdad, con un manual de cómo se quita un mal fario. Con confianza, y eso que Chuchi no andaba muy boyante, pero consiguió desahogarse. A su estilo, con elegancia, con un disparo de primeras que culminó una jugada que él mismo había generado. Supo a gloria no solo porque la pelota por fin fue para dentro, sino por todas las anteriores en las que el gol se quedó por el camino en las últimas semanas. Supone un chute de moral en un momento tan crucial de la temporada.

No fue el único hechizo que rompió La Cistérniga en la última tarde con horario de invierno. El partido había empezado frío, con el conjunto local como claro dominador sin necesidad ni tampoco posibilidad de ponerse estupendo. Tampoco es que a La Pedraja le molestara mucho que la iniciativa la llevara el vecino, aguardaba cómodo su oportunidad de sorprender. El problema era que esas oportunidades llegaban con dosificador.

Antes de abrirse el marcador los visitantes disfrutaron de dos ocasiones desde la esquina sin poder culminarlas, aprovechándose de que el conjunto de Roberto García tardó en desperezarse. El mayor peligro en el ataque de La Pedraja era el exrojinegro Cerro. Cristian evitó su gol con una gran intervención.

Con el 1-0 La Cistérniga perdió algo de control y se empezó a aplicar la lógica. En cuanto Fer y Pavel dejaron de manejar la pelota su equipo se desubicó. La clase que tienen en campo contrario desarbola a cualquier defensa y si a Pavel además le da por hacer de las suyas a 25 metros de la portería, nada más que hablar. Le encanta probar fortuna, que pregunten si no a Mojados y Laguna –qué tendrán para él los derbis–, que sufrieron sus ataques de lucidez en sus carnes. La 'Pavelada' se hace llamar. La Pedraja también la descubrió.

Disparó desde su casa pillando a Rubén adelantado –ya le había avisado minutos antes– y encarriló el choque. Si a los de Mariano Gutiérrez ya les cuesta de por sí reaccionar, ante dos goles solo tocaba esperar un milagro para seguir vivo en el duelo. El inicio de la segunda mitad generó ligeras esperanzas, con varias acciones a balón parado. Una de ellas acabó con un disparo desde lejos que tocó en Víctor, para después irse a la madera, prueba de que cuando no está de Dios…

Con los cambios el encuentro se abrió, seguramente porque ninguno de los dos se conformaba con el marcador. Entiéndase bien. La Pedraja tenía que arriesgar por motivos obvios y La Cistérniga veía el partido como una oportunidad idónea para coger confianza. A por ella que fue y la encontró, y a través de jugadores que la necesitaban.

Manu, sobre la bocina, se acabó sumando a la fiesta en un contragolpe con el rival totalmente descolocado. Arrancó desde medio campo y decidió culminar él, con un disparo que dobló la mano de Rubén. Su primera diana de la temporada, aunque para estreno el que había llegado minutos antes.

Carre disfrutó de la sensación de lo que es marcar, con un tanto, el tercero, que bien podría haberlo firmado un delantero. La cruzó con violencia y lo celebró como si del primero se tratara. Del partido no, sino de su etapa sénior –nunca es tarde–. Quizás si empieza a serlo para La Pedraja, al que le quedan ocho partidos para disfrutar del sueño de una temporada que aún no ha terminado. Sí para Santines, el fútbol tiene sus defectos. Aquí estará esperando tu regreso.

Un paso más del Laguna hacia el ascenso directo. Ni en su peor versión es capaz de perder puntos, si bien se enfrentó a un Villa de Simancas en crisis y sin efectivos. Colino adelantó a los locales al batir a un Villalba lesionado –se retiró tras esa acción–. Víctor Hugo empató antes del descanso con un golazo, primer paso hacia una tarde memorable en lo individual.

De hecho, marcó el segundo, pero fue anulado por un fuera de juego muy justo. El Laguna dominaba el segundo acto sin tener ocasiones claras. El conjunto de Alberto Parras, sin fondo de armario, acabó notando el cansancio y en el minuto 80 Cifu marcó el tanto del triunfo para su equipo, que está a cuatro victorias de subir a Tercera RFEF.

El Mojados sigue anclado en la irregularidad. Después de la goleada en Simancas cayó ante el Ribert dejando su peor versión ofensiva. Terminó el partido sin disparar a portería. De hecho, solo se produjo un tiro entre palos en todo el encuentro, el gol. En una buena transición Marcial decidió el choque a falta de trece minutos. No reaccionó el conjunto local en un tramo final lleno de interrupciones. Los pupilos de Diego Macón suman cuatro fechas sin ganar en casa.

El Betis rompió su espectacular racha con una derrota por la mínima ante el Onzonilla. Es dolorosa puesto que se produjo ante un rival directo y supuso perder el golaveraje particular. El partido fue disputado, con escasas ocasiones, pero el conjunto leonés consiguió deshacer el empate inicial en el segundo acto, en una contra en la que Marcial batió a David en un mano a mano. Los hombres de Yepes intentaron arrinconar al rival en el tramo final, pero se fueron de vacío.