Como el día y la noche

salamanca. Dos lanzamientos a puerta en noventa minutos. Con un gol, eso sí. Ese es el balance que presentó ayer el Betis de Valladolid en el encuentro ante Unionistas de Salamanca y esos números son el vivo reflejo del tipo de planteamiento por el que apostó el conjunto vallisoletano en Las Pistas, que cruzó la mitad del campo con el balón controlado en ocasiones contadas y que optó prácticamente por renunciar al ataque. Ya que cualquiera es libre en el fútbol de elegir a lo que quiere jugar el míster pucelano apostó por la defensa como una prioridad por encima de cualquier cosa y lo cierto es que con ese planteamiento tan pobre y poco atractivo para los ojos de los espectadores a punto estuvo su escuadra de hacer lo que todavía nadie ha hecho hasta la fecha, poner un uno en el casillero de derrotas del líder, aún sin estrenar.

Durante tres minutos sonaron las alarmas, los que pasaron desde que el Betis anotó el primer gol casi sin margen de maniobra para Unionistas de Salamanca hasta que los salmantinos equilibraron de nuevo la balanza pensando en que podía llegar el primer pinchazo de toda la campaña. Sin embargo, pese a la complicada tesitura de verse abajo en el marcador y estar a punto de perder casi el único objetivo que tiene USCF hasta el final de la temporada, el de no perder, los blanquinegros subieron un punto la intensidad y en ningún momento acusaron los nervios porque casi acto seguido volvieron a equilibrar la balanza y a poner las cosas en su sitio. O más o menos, porque lo normal y lógico es que la victoria de los de Astu hubiera sido más que clara después de hacer un balance de los noventa minutos en los que tan sólo uno de los dos equipos, el charro, quiso jugar al fútbol y hacer daño en la portería del rival.

Los partidos de Unionistas de Salamanca son, desde que se consiguió el ascenso hace un par de semanas con la victoria ante el Onzonilla, algo descafeinados. Todo el mundo está pensando ya en la temporada que viene y se frota las manos imaginándose un ilusionante proyecto para Tercera División que, quién sabe, quizás permita soñar con estar en los puestos punteros y pelear con los mejores por las posiciones de honor, esas que dejan jugar el play-off de ascenso a Segunda B.Pero todo eso ya llegará y ayer lo que tocaba era cumplir un nuevo trámite más. Astu tiene muy claro que estos días son para dar minutos a los menos habituales y también para hacer experimentos con el equipo. De ahí que Albertín comenzara el partido como lateral izquierdo, o que el centro de la zaga recordara más al que tanto brilló la pasada temporada con Antonio Paz y Jaime García como hombres importantes.

Tan sólo un equipo quiso jugar al fútbol con el balón. Ese fue Unionistas. El otro, el Betis de Valladolid, se limitó a replegar sus líneas y a tenerlas bien juntas, tanto que los hombres más adelantados no estaban mucho más lejos que a treinta metros de su portería. Once jugadores por detrás del balón tratando de cortocircuitar la chispa unionista, una electricidad que corría a cargo de Toni Miguel, de nuevo titular en el centro del campo, esta vez junto a Del Castillo, de nuevo imperial en cada acción.

El único pero que se le podía poner a los locales era quizás que la circulación de balón no era lo rápida que debiera para crear espacios y romper las líneas de un Betis ordenado. Pese a todo llegó una primera clara ocasión de Dela, que no acertó con la portería después de una gran jugada de Mario Sopale. Precisamente el habilidoso extremo se mostró muy activo y decidido a dejar buenas impresiones en los minutos que está teniendo en este tramo final de la temporada. Partiendo siempre desde la banda derecha, intentó el desborde una y otra vez y sobre todo sus finalizaciones tuvieron acierto, eso que tanto se echa de menos en otras ocasiones.Antes del descanso, hubo tiempo para que Jaime García estrellara el balón en el larguero a la salida de un córner.

El césped deLas Pistas sigue sin estar en las mejores condiciones y el balón iba dando demasiados botes como para que los controles y los pases fueran del todo precisos. En la segunda parte nada cambió. El Betis siguió replegando y Unionistas generando ocasiones pero cuando todo apuntaba al empate llegó la sorpresa mayúscula. En un balón parado el Betis realizó su segundo disparo entre los tres palos, un cabezazo de Chino que se coló para poner por delante a los vallisoletanos.USCF empató acto seguido con gol de Diego del Castillo, eso antes del pitido final y de la posterior tangana que afeó el término del choque.