El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha vuelto a dar la razón a la Federación de Castilla y León de Fútbol, desestimando los recursos de apelación presentados por el Club Deportivo Palencia Balompié por no haberle incluido en la Primera División Regional de Aficionados en la temporada 2018-2019, al no encontrarse al corriente de sus obligaciones de pago exigidas para competir.
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En octubre de 2019, el Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Valladolid dio la razón a la Federación de Fútbol de Castilla y León en el proceso abierto contra el Deportivo Palencia y contra el Tribunal del Deporte, señalando que actuó legítimamente al negarse a inscribir al conjunto palentino en Regional Preferente la temporada pasada (2018-2019).
El organismo regional pidió en julio de 2018 al club que preside Javier Rodríguez el depósito previo de 6.985 euros «para asegurar el cumplimiento de las obligaciones derivadas de la competición oficial y no perjudicar ni a la propia competición ni a los equipos que sí cumplen con sus obligaciones», afirmaba la Federación en un comunicado. Esta cifra, que se decidió en una Asamblea General de la Federación de Castilla y León, era un aval que correspondía a la deuda contraída con el entrenador Álvarez Tomé, además de arbitrajes y sanciones sin pagar a la federación.
El club palentino se negó a pagar esa cantidad, por lo que no fue inscrito en la categoría de Regional Preferente. Por este motivo, presentó un recurso ante el Tribunal del Deporte para que le fuera readmitido. Este se reunió el 28 de diciembre de 2018 en una sesión extraordinaria y acordó, por unanimidad, que la Federación de Fútbol de Castilla y León restituyera al Deportivo Palencia en el grupo A de la Primera División Regional de Aficionados.
El organismo de fútbol readmitió al club en Regional Preferente y decidió que tenía que jugar los miércoles, además de los domingos, para recuperar los partidos pendientes, ya que aterrizaban en la liga en la vigésima jornada. El Deportivo Palencia, que presentó alegaciones al Tribunal del Deporte de Castilla y León para no tener que jugar los miércoles, no acudió ante el Bosco ni ante el Venta de Baños, por lo que fue excluido e inhabilitado tras dos incomparecencias.
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La sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Valladolid señala que la Federación de Fútbol de Castilla y León cumplió con sus funciones y que el Deportivo Palencia no debió ser admitido por el Tribunal del Deporte en mitad de la temporada.
Ahora, el TSJ ratifica a la Federación Regional de Fútbol en la legitimidad de sus actos, velando por el bien de la competición y el cumplimiento de la equidad de sus participantes.
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