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CALOS CASTRO (OPTA)
Domingo, 2 de abril 2017, 23:04
Un gol de Guillem Martí pasada la media hora, perfecto en su diseño, dio un triunfo vital al Deportivo Palencia que, con la llegada de Miguel Zurro, suma pleno de victorias como visitante. Los morados sufrieron el acoso del Somozas tras el descanso, pero consiguieron blindar la puerta defendida por Alejandro, para sumar tres puntos que se presumían necesarios en la lucha por la permanencia.
Las urgencias del Deportivo pudieron más que la incómoda calma en la que vive el Somozas, condenado desde hace semanas al descenso. No es que el cuadro palentino jugase mejor, simplemente aprovechó una de sus dos ocasiones de la primera mitad. Precisamente, la falta de tino del conjunto dirigido por Stili, o la calidad de Alejandro, secundada por su zaga, impidieron que el Somozas se adelantase en la primera ocasión clara del juego. Y fue clarísima con un triple remate en el área pequeña de Pedro, de Isi y de Pedrosa, que no fue gol de milagro y porque Alejandro se mostró intuitivo para sacar los dos primeros remates, y un compañero de zaga el definitivo.
El equipo de Zurro quería imponer su control en el centro, intentando ampliar el espacio de circulación abriendo a Xavi Moré y a Fede Inestal, algo que resultaba complicado porque los locales interrumpían la fluidez al tener superioridad en esa franja con Óscar Sielva cerrando los espacios y con una línea de cinco zagueros. En el minuto 32, con el Somozas descolocado, llegó el tanto del Deportivo al funcionar una conexión de veinte metros rápida y precisa entre dos hombres de consumada calidad. Xavi Moré vio el movimiento de Guillem Martí por delante de los centrales, midió un centro para el punta que, cabeceando hacia atrás, superó por arriba a un sorprendido Molina.
El segundo tiempo también mantuvo el equilibrio inicial en el juego, con superioridad de las defensas. Prueba de ello es que la primera ocasión tardó trece minutos en generarse. Pedro recibió a 35 metros del marco rival y cuando todos esperaban que elaborase la parte final de un ataque combinado, decidió disparar al encontrarse solo, pero Alejandro metió los puños para evitar un gol que entraba a un metro de la escuadra. La respuesta la dio Moré en el minuto 62 con un disparo raso, cruzado y por el centro, que desvió Molina. A falta de un cuarto de hora, el meta visitante volvió a estar providencial metiendo una mano tibia, pero acertada, ante un remate a bocajarro de Fran Núñez tras el centro de Pablo desde la línea de fondo.
El equipo palentino estaba concediendo demasiado y a punto estuvo de llevarse un disgusto serio en un remate de Pedro, cuyo cabezazo se estrelló contra el larguero. Los locales habían cambiado el dibujo reduciendo el número de hombres en la retaguardia. La proximidad del final del choque se había vuelto tóxico para el Deportivo, para quien no corría el tiempo para llevarse los tres puntos vitales.
El repliegue intensivo concedía demasiados metros al Somozas, aunque a tres minutos de los 90 Rodri pudo dejar todo sentenciado en una contra por la izquierda, sin apoyos, que finalizó con un chut cruzado que Molina desvió con el pie. En los últimos minutos, los locales aceleraron las finalizaciones con centros al área que la defensa y Alejandro resolvieron con comodidad. Así, el Deportivo suma tres puntos necesarios en su lucha por la permanencia.
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