Esther Bengoechea
Jueves, 26 de enero 2017, 17:45
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El Deportivo Palencia ha tenido los días más convulsos de su corta y, por qué no, ajetreada historia. En poco más de tres días se ha pasado de tener un presidente, a tener dos a la vez y, de repente, no había ninguno capaz de dirigir al club y tomar las decisiones. Nadie sabía quién tenía el poder, quién firmaba las altas y las bajas o quién rendía cuentas en un momento dado.
Hasta que ayer la Junta de Castilla y León, a través de la Dirección General de Deportes, suspendió el registro de la composición de la junta gestora. Esto simplemente significa que todo está como antes, como hace cuatro días, cuando Javier Rodríguez era presidente de la entidad. «Se procede a la suspensión y se deja sin efecto la anotación registral de la composición de la Comisión Gestora de fecha 11 de enero de 2017», así concluye el documento que inhabilita a la junta gestora.
La directiva de Javier Rodríguez presentó un escrito en la Junta de Castilla y León el pasado martes, el día que se enteraron de que se había tramitado el acta de la junta gestora. Ellos defendían que no cesaron su junta directiva el pasado 2 de noviembre, día que se celebró una asamblea del club, como señalaban los integrantes de la junta gestora.
En el escrito presentado a la Junta, argumentaban que la asamblea se suspendió por miedo a que ubiera incidentes violentos y que nunca se cesó al presidente del club. La resolución afirma que la junta directiva escrita es la del 26 de agosto y se anula todo con carácter retroactivo.
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El de nuevo presidente del Deportivo Palencia, Javier Rodríguez, mostraba su satisfacción. «Vuelvo a ser presidente por muy alucinante que sea esta película», señalaba ayer, minutos después de haberse reunido con la plantilla y con el director deportivo, Paco Serrano. «Hemos estado transmitiéndoles tranquilidad y diciéndoles que todo ha sido un mal sueño y que volvemos a la normalidad. Que se centren, que son profesionales y que pongan los cinco sentidos en el terreno de juego y que de lo demás no se preocupen», argumentó.
«Tienen que tener toda la confianza del mundo para seguir adelante y no tener ningún tipo de duda porque esto vuelve a ser lo mismo que era hace una semana», añadía.
Dimisión en bloque
Por su parte, la junta gestora emitió un comunicado en la tarde de ayer para dimitir en bloque, un día después de que su presidente, Juan José Salvador, dejase su puesto alegando motivos personales.
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La renuncia no tiene validez ya que la propia Junta de Castilla y León había suspendido el registro de la junta gestora. Los integrantes de la misma también quisieron denunciar en el comunicado las amenazas y los insultos que sufrieron dentro del vestuario. «Un intento de agresión hacia nuestro legítimo presidente, Juan José Salvador, aparte de varias amenazas de violencia física hacia el resto de miembros de esta Comisión Gestora», afirma.
«Nuestra renuncia no es una carta blanca para que los rectores del club obren a su antojo. Seguimos denunciando la absoluta falta de transparencia, el desprecio al socio y las pocas ganas de respetar los Estatutos del club», argumenta el comunicado, que concluye exigiendo una rectificación en el comportamiento de la directiva.
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