De la tempestad a la calma

Después de una vuelta entera el Guijuelo vuelve a enfrentarse al líder, al Racing de Ferrol, con el recuerdo fresco de lo que sucedía en la jornada 11 en el Municipal. Cuando, un 31 de octubre, el segundo clasificado, el Guijuelo, se presentaba como aspirante a un primer puesto que ya habían ocupado, en las jornadas 3 y 4. En el duelo deportivo el que mejor estuvo, el que más apostó por la victoria, el que más lo mereció fue el Guijuelo, pero perdió y la derrota se convirtió en un punto de inflexión que sumió en el ostracismo a un equipo, que de estar rozando la gloria, en la jornada 11, pasó a entrar en barrena para y caer y caer.

Semana tras semana la situación se complicaba un poco más, las decisiones que se iban tomando deportivamente y en los despachos no ayudaban nada a salir de la espiral en la que se había sumido el equipo. Los nervios, las precipitaciones y los reproches fueron ganando espacio para dejar de lado los valores y los apoyos en los que se habían sustentado las diez primeras jornadas, cuando las carencias se tornaban en oportunidades.

Hasta ese momento todo iba bien o muy bien, pero desde la jornada 11, desde el trágico encuentro ante el Racing de Ferrol todo lo que podía ir mal, iba peor. La profunda crisis de fundamentos deportivos y de todo tipo, tocó fondo entre las jornadas 19 y 22, con las derrotas en casa ante el Sporting B, el Pontevedra, el empate en Somozas y el descalabro ante el Valladolid B. Sin duda el mes de enero podría haber servido de relanzamiento de la nueva aventura del Guijuelo, pero que no fue posible, en gran parte por las dudas, las tensiones acumuladas en el seno del club y tras un mercado de inverno convulso, que acabó por disipar cualquier tipo de posibilidad de levantar cabeza.

A partir de ahí, los de Rubén de la Barrera han tratado de templar las gaitas para dejar de tocar a arrebato y comenzar a tocar acompasadamente una melodía, que aún no se sabe si será para dar el do de pecho y lanzar un órdago a la grande, a los pares y al juego o bien si todo se queda en la consecución de un sí sostenido, que permita envidar a la chica. Y en esas está ahora mismo el Guijuelo.

Actualmente, los guijuelenses se están preparando para medirse al líder, que sigue siendo el Racing de Ferrol, pero no lo hace como aspirante al título, sino como décimo clasificado, asentado en media tabla, desde donde quiere volver a encontrar un punto de inflexión, pero esta vez para salir lanzado en busca de los primeros puestos.

Una derrota a manos de Pino

Durante todo este tiempo los gallegos en su campo, en A Malata, han ganado todo lo que han jugado, salvo dos empates, ante Coruxo y Cultural Leonesa y una derrota, la única en toda la temporada, la del partido ante el Astorga, la que curiosamente se llevaron los astorganos con gol de Pino, en ese momento titular con los leoneses y ahora delantero titular con el Guijuelo.

Por su parte los guijuelenses durante estas 19 jornadas han sufrido mucho más de lo que podría esperarse y después de muchas semanas calamitosas llegan al enfrentamiento con esperanzas renovadas, inmersos en un proceso de recuperación, que veremos si finalmente les coloca en la tesitura que plantilla, cuerpo técnico, club y afición esperan.

Una progresión que en las cinco últimas jornadas fuera de casa les ha permitido ganar tres encuentros y empatar otro. Por todo lo dicho, el Guijuelo que acusó, hasta el extremo, el revés que supuso la victoria del Rancing de Ferrol en el Municipal espera volver a retomar el pulso a la cabeza devolviendo la moneda a los gallegos.