El Guijuelo se acuesta líder con mucho trabajo

El Club Deportivo Guijuelo se llevó la victoria por la mínima ante el Compostela en el San Lázaro gracias a un solitario gol de Carlos Ramos y ayer se metió en la cama siendo el líder en solitario del grupo I de la Segunda División B, eso sí, a la espera de lo que haga en su encuentro de hoy el Racing de Ferrol ante el Burgos para saber si ese liderato se confirma o no. Los salmantinos se hicieron con los tres puntos ante un rival que llegaba al choque con unas urgencias y necesidades tremendas por salir de la zona de descenso, y de esta situación supo sacar provecho el conjunto que dirige Rubén de la Barrera, que dominó en todo momento el juego, especialmente, en la primera mitad, manteniendo al rival a raya, mientras que en la segunda parte controló los tiempos y evitó el juego de ataque de los gallegos.

Ya desde el primer momento se vio que el Guijuelo iba a tener que sufrir para ganar el partido. De hecho, las primeras ocasiones fueron para los locales porque cuando apenas se habían disputado tres minutos de juego Catu remató un córner fuera por muy poco y después Goti obligó a Kike Royo a detener su buen lanzamiento en dos tiempos. Pero a partir de ahí los de Rubén de la Barrera pasaron a tener el dominio territorial y empezaron a controlar el choque. Con el primer cuarto de hora ya sobrepasado, Raúl Ruiz ganó un balón a la espalda de la defensa y fue objeto de falta por parte de Jimmy, que pese a ser el último hombre del Compostela y cortar una clara ocasión de los visitantes tan sólo vio la cartulina amarilla como castigo a esa acción.

Aitor Aspas lo intentó con un libre directo que se marchó fuera y el Guijuelo seguía obligando al Compostela a limitar sus ataques a los costados dado el gran número de efectivos de los que disponía en el centro del campo. Los balones colgados de los gallegos apenas suponían un peligro real para los charros y tan sólo Goti inquietaba con sus acciones, pero sus centros o lanzamientos nunca terminaban de llegar a buen puerto. Eso sí, a la media hora llegó la ocasión más clara para los locales. El protagonista fue Chiño, que le ganó la espalda a la defensa del Guijuelo y en el mano a mano se encontró con una gran intervención de Kike Royo, que evitó que los gallegos pudieran ponerse por delante en el marcador. Además, Goti estuvo muy cerca de dar un nuevo susto porque su disparo tocó en Jonathan y se envenenó, pero la reacción de Royo fue de nuevo rápida para evitar el peligro.

Parecía que la primera mitad no iba a dar más de sí y que el partido se iba a marchar al intermedio sin goles, pero el Guijuelo vio el momento idóneo para golpear a un rival muy tocado anímicamente. A falta de tres minutos para el descanso, tras una jugada entre Raúl Ruiz y Nacho Rodríguez, Carlos Ramos apareció dentro del área para cazar un balón que se había quedado muerto y poner así por delante a los salmantinos, que ya tenían el partido donde querían y le habían asestado un duro golpe a un Compostela con muchas urgencias.

Todavía quedaba mucha tela por cortar pero el Guijuelo había dado un paso de gigante para subirse al autobús de vuelta a casa como líder de la categoría. En la segunda parte, eso sí, el guión del partido fue muy diferente porque los salmantinos dejaron hacer al Compostela aunque con control porque siempre mantuvieron a los gallegos lejos de su área. Los locales trataban de generar peligro por todos los medios posibles pero con el paso de los minutos la complicada situación que atraviesan comenzó a dejarse notar y los nervios y las urgencias hicieron acto de presencia. El Guijuelo trataba de no descentrarse en lo suyo, el trabajo defensivo, así que le valió con mantener el orden para que el Compostela se fuera desesperando poco a poco. Jimi probó suerte con un lanzamiento flojo y en el otro bando puso la réplica Carlos Ramos, pero las ocasiones brillaron casi por su total ausencia en estos segundos 45 minutos de partido.

El partido se atascó en el centro del campo porque el Guijuelo tejió allí una gran tela de araña en la que no pudo entrar el Compostela. Por si fuera poco, los gallegos se quedaron con diez por una mano absurda de Marcos, que trató de engañar al árbitro en un control. Orbegozo cruzó demasiado su lanzamiento y hasta ahí llegó el conjunto local, cada vez más agobiado por las prisas y por el enfado creciente de la afición, que mostró su descontento desde la grada. Los de Rubén de la Barrera pudieron matar el partido casi en el tiempo añadido pero Luque no acertó a batir al guardameta rival en un claro mano a mano, mientras que en el rechace Palazuelos mandó el balón fuera. ElGuijuelo sufrió y tiró de oficio en el San Lázaro pero se llevó tres puntos de oro que le sirven para ser, por lo menos provisionalmente, líder.